Fanático de los Dodgers demanda al equipo por sufrir una golpiza en el estadio que le ocasionó un daño cerebral
Por Florencia Freijo
Un fanático de los Dodgers de Los Angeles demandó al equipo por negligencia luego de haber sido agredido en el estacionamiento del estadio y, como consecuencia, haber sufrido un daño cerebral.
La víctima fue identificada como Rafael Reyna, quien junto a su esposa interpuso una demanda contra el club en la que señala que éste no revisó ni controló adecuadamente que el Dodger Stadium cumpla con todas las medidas de seguridad.
Ante esto, el vocero de los Dodgers, Joe Jareck, respondió por correo con un escueto mensaje: "sin comentarios".
Cabe recordar que Reyna, de 45 años, fue brutalmente agredido cuando se dirigía a su automóvil la noche del 30 de marzo de 2019 luego de asistir al partido entre los Dodgers y los Cascabeles de Arizona.
Según la demanda, Reyna estaba hablando por teléfono con su esposa cuando los atacantes "le propinaron numerosos puñetazos, lo cual ocasionó que colapsara en el asfalto, se golpeara la cabeza y quedara inconsciente".
El fanático se queja de que en el estacionamiento no había iluminación adecuada ni guardias de seguridad, y el personal que quedaba en el estadio tardó en encontrarlo. Además alega que mucho más tardó la atención médica de urgencia y exige una indemnización. La golpiza fue importante, al punto tal de que Reyna pasó días en coma inducido.
El fanático también asegura que las autoridades del club decidieron reducir su personal de seguridad en 2008 para ahorrar dinero. Además, el club volvió a permitir que se venda cerveza y limitó la presencia de uniformados.