Este viernes la Oficina del Comisionado de MLB anunció la suspensión para Julio Urías, ex jugador de los Dodgers de Los Angeles, por violar la política de violencia doméstica de la liga. El mexicano es reincidente y a pesar de ello el castigo es de cuatro meses.
En teoría, el lanzador zurdo de 28 años de edad podrá volver a jugar en Grandes Ligas después del Juego de Estrellas. En el circuito hay una alta demanda de lanzadores con su experiencia y talento, pero luce complicado que reciba una oportunidad.
En el pasado reciente hay casos que no invitan al optimismo, como el de Trevor Bauer que siendo ganador de un Cy Young y habiendo cumplido su suspensión no volvió a recibir ofertas en las mayores. Por eso Urías debe plantearse proseguir su carrera profesional en alguna de las ligas extranjeras.
Japón
La liga japonesa es, tal vez, la mejor opción para Julio Urías. No sólo por su calidad, sino porque podría servirle para empezar de nuevo y sin presión. En la NPB Trevor Bauer ha podido seguir lanzado en buen nivel y no es el único caso: varios jugadores desterrados de las Grandes Ligas han conseguido en Japón la oportunidad de prolongar sus carreras profesionales en una liga de buen nivel y que paga buenos salarios. Resulta incluso extraño que no lo haya intentado antes.