La búsqueda de los Yankees de Nueva York de jugadores que blindaran el infield los llevó a contemplar la posibilidad de firmar a Jorge Polanco en la agencia libre de MLB, pero el dominicano terminó regresando a Seattle.
El jugador de 31 años de edad y 12 de experiencia en las Grandes Ligas lucía como una opción ideal para el conjunto del Bronx por su capacidad para jugar en la segunda y tercera base, pero lo dejaron pasar.
Ahora los neoyorquinos tienen una crisis en el cuadro interior y lo ven ser una pieza clave para que los Marineros estén liderando su división y de seguro se arrepienten de no haber adquirido a Polanco cuando tuvieron la oportunidad.
1. Su gran inicio de temporada
Después de verse muy limitado en 2024 por la lesión en la rodilla, Polanco está mostrando ahora mismo su mejor versión, la que lo llevó a ser All Star y tomar votos para el MVP en Minnesota en 2019. El dominicano no parece estar sufriendo por su mudanza a la tercera base y acaba de ganar la distinción al Jugador de la Semana. Esta campaña tiene 9 vuelacercas, 5 dobles y 27 impulsadas y muestra promedios de .356/.406/.724 con OPS de 1.130.
2. La lesión y rendimiento de Jazz Chisholm Jr.
El desgarro en el oblicuo que dejará a Jazz Chisholm Jr. fuera de acción por alrededor de un mes es un golpe duro para los Yankees y no había manera de evitarlo, pero con su decisión de no traer a Polanco en el invierno ahora son dos los infielders que deben buscar. Ya el jugador de Bahamas estaba causando preocupación en Nueva York por su irregular rendimiento ofensivo (tiene average de .181, 7 jonrones entre sus 10 extrabases, 17 impulsadas y 39 ponches en 30 partidos) y todo eso lleva a que se lamenten de no haber adquirido al dominicano cuando tuvieron la oportunidad.
3. Su valor de mercado accesible
Polanco firmó con Seattle un contrato que le garantiza un salario de 7 millones de dólares en 2025 ( un poco por encima del valor de mercado que le estimaba Spotrac de $6 millones) y contempla una opción mutua para 2026 por una cantidad similar. Esos montos estaban al alcance de las finanzas de los neoyorquinos, y a pesar de que la gerencia de Brian Cashman hizo lo posible por minimizar el impacto del impuesto al lujo hubiese sido una inversión rentable.
4. Era el sustituto ideal de Gleyber Torres
La salida de Gleyber Torres de los Yankees era inevitable, pero en lugar de buscarle un sustituto en el receso de temporada, se aferraron al plan original de la gerencia: entregarle la segunda base a Jazz Chisholm Jr., que ahora se perderá un mes por lesión y deja dos huecos en el infield. Se hubieran ahorrado al menos uno de los problemas que ahora tienen si Jorge Polanco estuviera instalado en la segunda almohadilla.