¿Qué es "Capital 304" que mencionó Lamine Yamal en su discurso en la gala del Balón de Oro?

En la edición 2024 del Balón de Oro, Lamine Yamal se llevó el Trofeo Kopa, que se entrega desde el 2018 para reconocer al mejor futbolista del mundo menor de 21 años. Por supuesto para él esto significó una muestra importante del trabajo que realiza a diario, y por eso en su discurso agradeció a muchas personas, aunque también hizo un nombramiento especial.

El delantero del FC Barcelona subió al escenario y su alocución fue breve, aunque destacó: "Quería agradecer a mi padre, a mi madre, a mi abuela. También al míster Luis (De la Fuente), a Xavi, que estuvo conmigo, y Hansi (Flick) ahora. A mis compañeros, Visca el Barça y Capital 304".

Es justamente este último número el que desconcertó a muchos, que desconocen su origen, y la realidad es que se trata del código postal de Rocafonda, el barrio donde creció el deportista junto a sus padres, que llegaron a España desde otros países, buscando un futuro mejor.

Este lugar, tan importante para el futbolista, está ubicado en el municipio de Mataró, dentro de la comunidad autónoma de Cataluña. Hace aproximadamente 20 años se convirtió en una especie de refugio para inmigrantes y obreros, y de hecho se creó una oficina en la que se trataban temas relacionados con ayudas sociales, que incluían no sólo el bienestar económico de las personas, sino también mejoras en infraestructura, ante un supuesto abandono del Estado.

El lugar es tan importante para Lamine que de hecho cada vez que marca un gol hace con sus manos el número 304, a modo de celebración. La gente que fue su vecina y hoy lo ve desde la televisión, celebra con él el hecho de que haya logrado llegar a lo más alto del fútbol.

"Sabíamos que iba a jugar con el primer equipo del Barça, seguro, pero no la proyección que está teniendo ahora", dijo Juan Carlos Serrano, el dueño de un bar de la zona al diario El Gráfico. A él se le sumaron muchos otros adolescentes que cuando eran niños jugaban a la pelota con Lamine, y hoy afirman que adoptaron el gesto 304 para celebrar cuando anotan un gol, tal como lo hace el culé.