Este 8 de mayo, los mas de 1.000 millones de fieles católicos que hay alrededor del mundo se enteraron de la noticia de que el nuevo papa de la iglesia es León XIV, quien tiene por delante la difícil tarea de seguir el legado de Francisco, uno de los más disruptores de la historia de la religión.
Este nuevo líder es un hombre carismático y cercano a la gente. Aunque todos los vean como un ser superior en realidad es alguien normal con aficiones comunes, una de las cuales es el béisbol, donde sigue de cerca a los Cachorros de Chicago.
Congratulations to Pope Leo XIV! pic.twitter.com/s02yDDegQd
— Chicago Cubs (@Cubs) May 8, 2025
El motivo de lo anterior seguramente se relaciona con el hecho de que nació en Chicago, Illinois, el 14 de septiembre de 1955. La cuestión geográfica hizo que surgiera la incertidumbre debido a que los Medias Blancas de Chicago también se atribuyen a este hombre como uno de sus fanáticos.
John Prevost, hermano del nuevo papa, dijo sobre la polémica: "Él es de los Sox, y luego la radio anunció a los Cubs, y eso no es cierto", en una entrevista que dio recientemente a los medios.
Los Medias Blancas emitieron un comunicado en el que se apoyan sobre la postura del hermano del sumo pontífice: “La familia siempre sabe lo mejor, y parece que el fanatismo de toda la vida del Papa León XIV se inclina un poco más hacia la 35 y Shields", afirmaron.
Well, would you look at that... Congratulations to Chicago's own Pope Leo XIV pic.twitter.com/U5DJ7TOyDr
— Chicago White Sox (@whitesox) May 8, 2025
Por otro lado agregaron: "Algunas cosas son más grandes que el béisbol, y en este caso, nos alegra tener a un fanático de los Medias Blancas representado en el Vaticano. Una camiseta de los Medias Blancas a rayas con su nombre y una gorra ya están en camino a Roma, y, por supuesto, el pontífice siempre es bienvenido en su estadio”.
Robert Francis Prevost (como es su nombre original) también disfruta mucho del tenis. Alguna vez contó que es un aficionado y que en Perú, donde vivió mucho tiempo, lo practicaba siempre que podía.