Vladimir Guerrero Jr. fijó como plazo el comienzo de la pretemporada de MLB para discutir un nuevo pacto con los Azulejos de Toronto. Lo hizo con el objetivo de mantener el tema fuera de los focos y concentrarse en su preparación.
Pero eso ha sido imposible. Los portales de Grandes Ligas no hacen más que hablar de cifras, posibilidades de contrato y analizan pros y contras de aceptar una extensión o probar suerte en la agencia libre.
Guerrero parece tener ya su objetivo fijado en el mercado de invierno, pero en el equipo canadiense no han renunciado a retenerlo. Y las palabras del presidente del equipo, Mark Shapiro, lo confirman.
“Creo que lo vamos a firmar”, declaró Shapiro esta misma semana. “Creo que lo vamos a extender. La razón por la que siento eso es porque estamos claramente alineados con el desenlace deseado”.
Por lo que se sabe, el jugador pedía menos de 600 millones de dólares y en el conjunto ofrecieron $50 millones menos. Ahora el inicialista dominicano de 26 años ha estado sacando cuentas de lo que pueden ser sus aspiraciones cuando negocie en el mercado abierto.
“Si logro una temporada digna de MVP, creo que estaré en la conversación sobre los $700 millones. Si tengo un mal año, mi mínimo son los $500 millones”, le dijo Guerrero Jr. al periodista Yancen Pujols.
La decisión que tome estará basada en lo que considere una prioridad. Ha dicho que le gusta tanto la ciudad como el equipo de Toronto y esta ha sido su organización desde que firmó como profesional. Si este aspecto emocional tiene peso en su evaluación podría considerar aceptar la oferta de extensión.
Blue Jays president Mark Shapiro is optimistic that the team will eventually sign Vladimir Guerrero Jr. to a new deal pic.twitter.com/wHcYE0qZoR
— Sportsnet (@Sportsnet) March 20, 2025
Pero si lo que lo mueve es la búsqueda de un contrato masivo que lo una a Juan Soto y Shohei Ohtani en el top 3 de de los jugadores mejor pagados en la historia del circuito, la agencia libre es su mejor opción.
Aunque desde luego no deja de ser un riesgo. Pete Alonso es un ejemplo reciente -pero no el único- de cómo el mercado no es tan abierto a estos grandes pactos y podría resultar contraproducente arriesgarse.
Los Mets de Nueva York ya dijeron que sería complicado firmarlo, los Dodgers de Los Angeles no han sido parte de la discusión y eso hace que sus opciones puedan ser limitadas; sobre todo entendiendo que el dominicano quiera ir a un equipo con aspiraciones de trascender en los playoffs.
Aceptar la renovación de 600 millones de dólares podría resultar la decisión segura; misma que le garantice el futuro en lo económico y lo laboral y su estatus de estrella y principal figura de una escuadra; aunque pueda significar ganar $100 millones menos y reducir sus posibilidades de jugar en una Serie Mundial. No es fácil la decisión que debe tomar.