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3 claves en la victoria de los Warriors en el quinto juego de Las Finales de la NBA

Curry logró 16 puntos en el partido
Curry logró 16 puntos en el partido / Ezra Shaw/GettyImages
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Las estadísticas dicen que el ganador del quinto juego de Las Finales de la NBA termina levantando el título en el 73 % de las veces. Esto juega a favor de los Golden State Warriors, equipo que venció a los Boston Celtics 104 por 94 para colocar la serie 3-2 a su favor.

El conjunto dirigido por Steve Kerr se apoyó nuevamente en el juego perimetral y lograron sacar lo mejor de su juego en el último cuarto para ponerse a un paso de levantar otro cetro.

Stephen Curry, para sorpresa de muchos, no anotó triples en el partido y rompió una racha de 239 partidos consiguiendo al menos un acierto desde la larga distancia. El base terminó con 16 puntos.

A continuación, repasamos las claves del triunfo de los Warriors sobre los Celtics en San Francisco.

1. Andrew Wiggins imponente en ambos costados

Andrew Wiggins fue el máximo anotador de Golden State
Wiggins fue clave en ambos costados de la duela / Pool/GettyImages

Andrew Wiggins está sacando lo mejor de su talento en Las Finales de la NBA y fue nuevamente clave para la victoria. El alero terminó como el máximo anotador de su equipo con 26 puntos y 13 rebotes. Además, realizó un gran trabajo en defensa ante Jayson Tatum y Jaylen Brown. El canadiense tiene 29 rebotes en los dos últimos compromisos.

2. Cerraron a todo tren el último cuarto

Klay Thompson fue clave en el triunfo
Thompson terminó con 21 puntos / Ezra Shaw/GettyImages

Los Warriors fueron capaces de levantarse de un mal tercer cuarto, en el que llegaron a estar perdiendo ante los Celtics, para sacar lo mejor del repertorio en el último parcial. El equipo verde ganó 35 a 24 el tercer parcial pero luego los Warriors se recuperaron y ganaron el parcial definitorio 29 a 20 para anotarse la victoria.

3. Aprovecharon las pérdidas

El costado defensivo de los Warriors fue fundamental
La defensa de los Warriors fue clave / Lachlan Cunningham/GettyImages

Los Celtics no supieron controlar el ritmo del juego y tuvieron 18 pérdidas de balón, que fueron bien aprovechadas por los Warriors, equipo que apenas perdió 6 balones. La presión defensiva en el perímetro, sin descuidar la pintura, fue otro de los puntos altos del equipo dirigido por Steve Kerr, entrenador que busca su cuarto título como estratega.