5 cosas que no sabías de Josh Gordon
Por Miguel Bonilla
El receptor Josh Gordon fue habilitado para jugar en la NFL tras cumplir casi un año de sanción por consumo de drogas para mejorar su rendimiento y abuso de sustancias. Ha tenido una carrera plagada de ausencias y con un par de campañas de altísimo nivel, a lo cual aspira volver ahora con los Seahawks, quienes esperan que pueda dar un mano a su cuerpo de receptores.
A continuación 5 cosas que seguramente no sabías de la vida de Josh Gordon.
1. Gordon fue un excelso deportista en la secundaria
Desde temprana edad quedó claro que Gordon no era una atleta común y corriente. Destacó jugando fútbol americano, baloncesto y como miembro del equipo de pista de su equipo.
2. Fue suspendido en la Universidad por consumo de marihuana
Durante su etapa universitaria inicialmente jugó con Baylor, antes de verse involucrado en una situación en la que se le comprobó portar marihuana junto con otro compañero. Terminaría siendo suspendido y después decidiría transferirse a la Universidad de Utah.
3. Tiene una hija llamada Emma y tuvo problemas en reconocerla
En 2016 Gordon negó la paternidad de su hija Emma, luego de meses de discusiones que inclusive llegaron a la corte con la madre de la niña, Christian Lockhart. Finalmente aceptaría sus responsabilidades y declararía de manera pública que si era el padre.
4. Su temporada 2013 fue legendaria
En los Browns aún recuerdan con cariño el impresionante rendimiento de Gordon en 2013, quien se encargó de paso de romper récords. Ante Steelers y Jaguars consiguió ser el primer jugador en la historia de la NFL en conseguir dos juegos consecutivos con 200 o más yardas. Terminaría la temporada con un total de 1.646 yardas totales esa campaña.
5. Acumula cinco suspensiones por drogas en la NFL
En diciembre de 2019 recibió la quinta sanción de su carrera, esta vez de manera indefinida y terminó costándole un año más de su carrera. En el pasado se había perdido ya dos campañas en circunstancias similares. En Seattle esperan que esto no vuelva suceder en el futuro, pese a la tendencia.