5 razones por las que Ozzie Guillén debe ser el nuevo manager de los Medias Blancas de Chicago
Por Mariana Moreno
Igualar el récord de derrotas seguidas en la Liga Americana (21) parece haber sido la gota que colmó el vaso de la paciencia de los Medias Blancas de Chicago, que anunciaron el despido inmediato del manager Pedro Grifol sin esperar al final de la temporada de MLB.
En el mismo comunicado dejaron saber a los seguidores del equipo que comenzaron su búsqueda de un timonel para la próxima campaña de Grandes Ligas.
Hay varios candidatos que el gerente Chris Getz podría considerar, pero varios sectores coinciden en señalar al venezolano Ozzie Guillén como el favorito a quedarse con el cargo y regresar al banquillo de los Medias Blancas. Hay varios argumentos que respaldan su postulación.
1. Su pasado exitoso en el equipo
Con Guillén al mando del equipo, los Medias Blancas rompieron en 2005 una sequía de 88 años sin ganar la Serie Mundial. Han pasado ya caso dos décadas y los patiblancos no han conseguido regresar a la instancia decisiva del campeonato. Como cabeza del cuerpo técnico entre 2004 y 2011, el venezolano dejó balance de 678-617 y llevó al equipo a dos postemporadas.
2. Sus éxitos recientes en la LVBP y Serie del Caribe
Ozzie Guillén aceptó el desafío de regresar a dirigir a la liga profesional venezolana y condujo a los Tiburones de La Guaira a su primer título en casi 40 años. No contento con ese logro, conquistó la Serie del Caribe disputada en febrero en Miami, en la casa de los Marlins, y le demostró a todos que todavía puede ser manager de Grandes Ligas.
3. Sus ganas de reivindicarse tras el fracaso en los Marlins
El paso de Guillén por los Marlins en 2012 fue turbulento: unas declaraciones suyas relacionadas con temas políticos causaron indignación y le ganaron una suspensión y además no pudo tener éxito. Lo despidieron tras dejar récord de 69-93 y él lo admite: “me botaron por malo”. Con su temperamento, es lógico pensar que busca reivindicarse.
4. Nadie conoce mejor a la organización que él
Estuvo en el banquillo por 8 temporadas, pero su relación con la organización de los Medias Blancas es mucho más profunda. Fue el campocorto del equipo en 13 de sus 16 años como jugador de Grandes Ligas y luego ha actuado domo comentarista en las transmisiones del equipo. Ha seguido muy cerca al conjunto desde siempre y conoce muy bien sus necesidades.
5. Tendrá el respeto de sus jugadores
Entre las causas del fracaso de Pedro Grifol en Chicago se ha mencionado que sus jugadores no lo respetaban. Eso no pasará con Ozzie Guillén en el banquillo. Quienes han jugado para él conocen su carácter y saben que su disciplina es férrea. Por eso se gana el respeto de los peloteros. Para un equipo en reconstrucción eso será clave.