EN LA MIRA | 76ers deben acabar pronto la novela de Ben Simmons si no quieren destruir su temporada
Los Philadelphia 76ers suspendieron a Ben Simmons para el primer partido de la temporada ante los New Orleans Pelicans por conducta inapropiada contra el equipo durante un entrenamiento este martes, en el cual tuvo una fuerte disputa con el entrenador Doc Rivers.
Según Shams Charania del medio The Athletic todo empezó cuando Rivers le pidió a Simmons unirse a las prácticas defensivas, algo que el jugador rechazó, lo cual desencadenó en que el coach lo mandara para su casa como medida de castigo. Simmons, en un ataque de ira, dejó caer el balón y se marchó del lugar.
Este episodio es el último de una película de terror que empezó en los playoffs de la temporada pasada, cuando el jugador australiano inexplicablemente dejó pasar una volcada abierta en el séptimo partido de la serie ante los Hawks, en lo que fue una acción que terminó sepultando las aspiraciones de su equipo.
Joel Embiid y Doc Rivers tuvieron duros comentarios en contra de Simmons luego de la eliminación y eso llevó a que el jugador de 25 años decidiera que quería irse de la organización.
Luego de que los 76ers amenazaran con multarlo fuertemente por incumplimiento de contrato, Simmons finalmente se reportó al equipo el pasado 11 de octubre, pero sus mala actitud en los entrenamientos llevó a esta lamentable pelea con Rivers.
Su ausencia en los duelos de pretemporada le trajo como consecuencias una multa de 1.4 millones de dólares, lo cual por supuesto le coloca más gasolina a un fuego que está quemando todo el edificio.
Queda claro que los 76ers como organización tienen mucha culpa en lo que está sucediendo, ya que no debieron esperar a que las cosas llegaran hasta este punto, pero sería un error aún peor si siguen esperando para solucionar algo que ya no tiene marcha atrás.
Por supuesto no puedo dejar de mencionar lo profundamente decepcionado que me siento con Ben Simmons, un jugador al cual la afición de Philadelphia apoyó incondicionalmente a pesar de su ridícula negativa de no querer lanzar triples, algo que lógicamente favorece a sus rivales, quienes simplemente se alejaban de la línea de tres puntos, sabiendo que Benjamin no se atrevía a disparar.
Ver a Simmons tomando una actitud tan inmadura y poco profesional es un escupitajo en la cara a la afición de 76ers, quienes desde ya lo tienen en la lista de los más odiados en la historia del equipo.
Los 76ers deben acabar con este drama y mandarlo lejos lo antes posible, lo cual ayudaría a que Joel Embiid y el resto del plantel se quiten semejante distracción de encima. Mantenerlo en estas condiciones sería cocinar la receta del fracaso absoluto en la temporada 2021-22.