Antonio Brown gastó la última oportunidad que tenía para seguir en la NFL
Los Tampa Bay Buccaneers dejaron en libertad al receptor abierto, Antonio Brown, luego de su comportamiento durante la Semana 17 ante los Jets.
El veterano jugador decidió quitarse el uniforme y su indumentaria protectora y abandonó el partido sin dar explicaciones, no sin antes hacer gestos a los presentes en el MetLife Stadium. Su compañero Mike Evans intentó detenerlo pero no pudo evitar que se marchara.
Inmediatamente luego del partido el entrenador, Bruce Arians, dijo que Brown "ya no era parte del equipo" y todo parece indicar que su carrera en la NFL también llegó a su fin.
Tom Brady decidió darle una oportunidad y convenció al equipo de traerlo a la organización la temporada pasada, en lo que fue un movimiento acertado, ya que el experimentado receptor abierto fue clave en la victoria en el Super Bowl ante los Kansas City Chiefs.
Pero luego de su inexplicable berrinche el pasado fin de semana, es muy poco probable que otro equipo decida darle un nuevo contrato. Si no puede comportarse teniendo como compañero a un modelo de consistencia y profesionalismo como lo es Brady, nada garantiza que en otro equipo no salga con otra falta de respeto como la que tuvo en Nueva York.
Siete participaciones en el Pro Bowl, dos veces líder de yardas recibidas, cuatro veces miembro del All Pro Team y un título de Super Bowl son algunos de los logros de su gran carrera, la cual siempre quedará la sensación que pudo ser mejor, pero su mente y entorno siempre le jugaron en contra al ahora agente libre de 33 años.