¿El aplazamiento de los Juegos Olímpicos de Tokio por el COVID-19 afectó a los atletas?
Por Tito Ponte
Los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 serán recordados a lo largo de la historia por haber sido aplazados un año a causa de una pandemia que afectó en lo social, económico, psicológico y hasta en lo deportivo.
Es la primera vez que se prolonga un inicio. El ciclo olímpico se modificó de cuatro a cinco años por una causa de fuerza mayor: el COVID-19. En consecuencia, la preparación de las delegaciones y de los atletas del mundo se vio afectada, pero para todos por igual.
Sin embargo, varias de las grandes figuras y candidatos al podio sorprendieron por declaraciones que pusieron en evidencia su vulnerabilidad.
Simone Billes, una recordista y medallista olímpica que sobresalió de manera grandilocuente en la edición de Río 2016, llegaba como una de las máximas figuras a Tokio, haciendo presagiar que acabaría con todas sus rivales en la gimnasia, lo cual no ocurrió.
La norteamericana sorprendió al mundo olímpico declarando que no participaría en varias competencias para "cuidar su salud mental". Si bien es cierto que era un tema que previo a los Juegos Olímpicos ya se tocaba, no cabe duda que los efectos de la pandemia produjeron mayores complicaciones en este aspecto para deportistas de élite.
Otro de los ejemplos es la tenista Naomi Osaka, que previo a la cita nipona ya había acusado algunos problemas de estrés mental, producto del rigor de la competencia y, además, ocasionado por todo el golpe emocional causado por lo que vive el mundo respecto al COVID-19.
Un caso algo distinto, pero no lejano, fue el de Novak Djokovic. El número uno del tenis fue eliminado de la contienda sin poder conseguir una sola medalla, y previamente había hecho una crítica indirecta a Simon Biles por no aceptar la presión que genera el deporte. Finalmente, "Nole" no aguantó esa misma presión y se puso en evidencia ante el mundo.
Como caso opuesto podemos mencionar a la delegación cubana. El equipo antillano superó lo hecho en su presentación de Río 2016, sumando mayor cantidad de medallas de oro con seis, tres más que las conseguidas en suelo amazónico.
Hubo factores negativos, sí. Pero las condiciones se dieron para todos por igual. El factor psicológico, sin duda alguna, fue relevante.