Así reaccionó Joana Sanz tras saber la condena de Dani Alves por violación

El mundo del fútbol se revolucionó luego de que Dani Alves fuera condenado a más de cuatro años de prisión por el delito de violación a una joven en una discoteca de Barcelona; hecho que derivó en su detención, en enero de 2023. Y el fallo llegó por supuesto a oídos de Joana Sanz, su esposa, quien parece no haberse sentido demasiado afectada.

Justo minutos después de que la noticia se volviera de interés internacional, la modelo española publicó algunas imágenes en sus historias de Instagram, donde mostró primero una piscina, y después una taza de café con algunos maquillajes de fondo, lo cual daba cuenta de que estaba trabajando.

Por supuesto las críticas surgieron rápidamente y ella se defendió diciendo: "Tan feministas para una cosas y para otras...". Además dejó en claro: "Lo que yo publico en redes sociales no es lo que hago 24/7. No siempre tienen por qué saber cómo yo me siento o cómo me deje de sentir. Cuando yo me abro y quiero expresar mis sentimientos, lo hago y cuando no, no tengo por qué".

Cuando el brasileño fue puesto tras las rejas, Sanz anunció públicamente que le pediría el divorcio. Sin embargo eso nunca pasó y ella contó a la prensa al respecto: "Seguimos casados, se habló de divorcio, pero él no me lo quiso dar". También añadió: "No nos vamos a divorciar, de momento. Yo sólo pienso en mí".

El exfutbolista además le escribió varias notas y cartas a su esposa desde la cárcel. En una oportunidad le dijo: “Por un beso de la flaca yo daría lo que fuera...”, haciendo alusión a la reconocida canción "La Flaca", de la banda Jarabe de Palo. “Donde sea, como sea, lo que sea… Pero contigo a mi lado siempre. Te quiero”, añadió.

La canaria por supuesto fue llamada varias veces por la justicia y aparentemente, en una de sus últimas declaraciones, dijo que su marido llegó a casa "muy borracho", después del hecho. Esto coincide con la versión que él y su abogada intentaron fijar, con el fin de que se vuelva inimputable por estar bajo el efecto de sustancias.

Lo anterior no sirvió ya que en el fallo, las autoridades afirmaron que no hubo consentimiento y que “el acusado tomó bruscamente a la denunciante, la tiró al suelo y evitando que pudiera moverse la penetró vaginalmente, pese a que la denunciante decía que no, que se quería ir”.