¿Blake Snell es el abridor que le faltaba a los Padres para tener una mejor rotación que los Dodgers?

Los Padres de San Diego volvieron a quedarse cortos en sus aspiraciones en la postemporada de 2020 en la MLB y ahora parecen ir por todo.

El pitcheo parecía ser el único departamento con debilidades y ahora, el anunciado cambio que llevó a Blake Snell a San Diego hace que el equipo de la ciudad muestre una rotación de temer.

Con el zurdo entre los dos primeros de la rotación, junto a Dinelson Lamet, los Padres parecen tener ventaja incluso sin Mike Clevinger, que se perderá la campaña de 2021 mientras se recupera de la cirugía Tommy John.

Snell, que ganó el Cy Young en 2018 viene de un buen 2020, con marca de 6-4 y efectividad de 3.16 en 17 aperturas. Promedió 11.3 ponches por cada nueve innings y sus riales solo batearon .216 contra él.

También le fue bien contra los Dodgers en dos aperturas de la Serie Mundial y es precisamente el equipo de Los Angeles el que parece estar en la mira de los Padres con este reforzado cuerpo de abridores.

Snell y Lamet (3-1, 2.09 EFE, 93K) estarán seguidos por Zach Davies (7-4, 2.73 EFE, 63K) y Chris Paddack (4-5, 4.73 EFE, 58K). El quinto lugar será para uno de los jóvenes valores del equipo, MacKenzie Gore o el cubano Adrián Morejón.

De momento los Dodgers, el mejor equipo de la Liga Nacional en tres de las últimas cuatro temporadas, siguen viéndose como favoritos aunque la llegada de Snell puede obligarlos a hacer movimientos, como contratar a Trevor Bauer para reforzar su rotación.

El cuerpo de abridores de los Dodgers fue uno de los mejores la temporada pasada.

Tienen dudas sobre la incorporación de David Price, pero si consiguen que se integre a la rotación del manager Dave Roberts le dará solidez al grupo comandado por Clayton Kershaw (6-2, 2.16 EFE, 62K) y en el que también se destaca Walker Buehler (1-0, 3.44 EFE, 42K).

Los otros puestos se los disputan Tony Gonsolin (2-2, 2.31 EFE, 46K), Julio Urías (3-0, 3.27 EFE, 45K) y Dustin May (3-1, 2.57 EFE, 44K).

Los Dodgers, aunque siguen siendo un equipo sólido, deben tomar medidas. La llegada de Snell mejora tanto la rotación de los Padres que augura una dura lucha en el Oeste de la Nacional.