¿Cómo fue la evolución defensiva de Miguel Cabrera en el béisbol?
Por Fernando Martínez
Miguel Cabrera es uno de los mejores jugadores de la MLB. Sus hazañas seguramente lo llevarán a ser parte del Salón de la Fama una vez que se retire.
Antes de comenzar la temporada 2022 el venezolano cuenta con un historial de logros impresionantes, entre los que se incluyen 4 títulos de bateo, 7 Bates de Plata, Triple Corona de Bateo, 2 MVP, 2 Premios de Mejor Jugador de la MLB, 11 Juegos de Estrellas y un anillo de Serie Mundial.
A la fecha, se proyecta que "Miggy" compartirá su tiempo de juego entre defender la primera base y bateador designado, para tratar de extender su carrera productiva al menos hasta el 2023.
Sin embargo, al revisar la carrera de Cabrera a la defensiva en el portal especializado Baseball Reference, se observa que el venezolano ha cubierto varias posiciones a lo largo de su trayectoria.
Al momento de ser firmado por la organización de los Marlins de Florida (Hoy Miami), lo hizo como defensor de las paradas cortas con un bono de 1.8 millones de dólares que para ese momento impuso un récord para jugadores de su país.
Su evolución en ligas menores obligó a que cada año Cabrera fue ascendido de nivel, hasta que llegó un momento que la organización de los Marlins le dio la oportunidad de subirlo al equipo grande en el 2003, pero como jardinero debido a la presencia de Mike Lowell en tercera base y su compatriota Alex González como shortstop.
Posteriormente, luego del campeonato de Serie Mundial de 2003, Cabrera se adueñó de la antesala a tiempo completo, proclamándose como el eje de la ofensiva de una novena en reconstrucción.
Los Marlins decidieron cambiarlo en la temporada de 2007 a los Tigres de Detroit, en el que también sería tercera base de todos los días. Sin embargo, entre las temporadas de 2009 y 2013 experimentó cambios a la primera base y tercera almohadilla, debido a las firmas de Carlos Guillén y Prince Fielder.
Fue a partir de la temporada 2014 que Cabrera se hizo definitivamente de la inicial en los Tigres y desde la campaña 2019 tiene un rol más prolongado como bateador designado, debido a las lesiones de cadera y rodilla que lo han aquejado.
En total Cabrera ha jugado en su carrera de 19 años: 1.195 partidos como primera base, 697 en la tercera, 347 como jardinero (Derecho e izquierdo) y 343 como bateador designado. Sin embargo, jamás lo ha hecho como campocorto, posición original por la que fue firmado.