¿Cómo le fue a Juan Soto desde que los Yankees no pudieron adquirirlo en 2023?

Juan Soto y los Yankees de Nueva York estuvieron muy cerca de encontrase antes de la fecha límite de cambios de esta campaña. Los Padres ya conocían que sus posibilidades de llegar a la postemporada eran muy bajas y se plantearon la opción de canjear al dominicano para refundar el proyecto en San Diego.

El cambio en definitiva no llegó y los Yankees quedaron fuera de la postemporada por primera vez desde el 2016. Entre tanto, el jardinero de los Padres cerró la temporada con un alto rendimiento, siendo el mejor jugador de su equipo y demostrando que podría haberle cambiado la cara a los neoyorquinos, que antes del 1 de agosto conservaban chances de avanzar a los playoffs.

Si evaluamos la segunda mitad de la temporada de Soto, notamos que tuvo un mejor rendimiento que en la primera etapa. El nacido en Santo Domingo fue mucho más agresivo en el plato para el final de la contienda. En la segunda etapa de la temporada conectó 18 jonrones y remolcó 58 carreras, con average de .283 y OPS de .945, en 67 partidos disputados.

En cambio, en la primera fase del torneo conectó 15 vuelacercas y empujó 47 rayitas, con promedio al bate de .265 y OPS de .898 durante 90 encuentros. El rendimiento de Soto explotó en septiembre con average de .342 y OPS de 1.128. Esos números hubiesen ayudado a cualquier equipo con medianas chances de entrar a postemporada, como los Yankees.

No podemos decir que lo que hizo el pelotero de 24 años con los Padres lo iba a repetir en Nueva York, pero su ofensiva fue muy superior a la mostrada por el colectivo de los Mulos, que en la segunda mitad dejaron un pobre promedio al bate colectivo de .219 con .693 de OPS. Sin duda, el madero del dominicano hubiese ayudado a levantar al equipo.

Soto se quedó en San Diego y tiene un año más de control y elegibilidad al arbitraje salarial. Será agente libre en 2025. Ahora parece más complicado para los Yankees reforzarse con el outfielder en un cambio, ya que para que eso ocurra los Padres deberían tener una campaña 2024 muy mala que los obligue a salir de Soto antes de la fecha límite.

Pero si ocurre lo que todos esperan y los eclesiásticos son competitivos en la zafra que viene, es probable que Soto consiga su gran extensión de contrato por 500 millones de dólares.