¿El despido masivo en las ligas menores y la desaparición de sucursales ayudará al béisbol en el futuro?
Por Mariana Moreno
Hay toda una polémica por las últimas noticias en la MLB y no sólo por los recortes salariales que propusieron a la Asociación de Jugadores. Sobre todo, hay revuelo por el despido masivo de pelotero de las ligas menores.
Cerca de 1.000 jóvenes fueron dejados en libertad por sus organizaciones de las Grandes Ligas esta semana y todavía faltan por decidir sobre el tema algunos equipos, como los Dodgers de Los Angeles y los Yankees de Nueva York. Y como en todo asunto de béisbol, hay un debate abierto.
Hay quienes están escandalizados porque dicen que la decisión es perjudicial para el desarrollo del béisbol. Que una inminente cancelación de la temporada en las ligas menores frenará el desarrollo de muchos jugadores. Dicen también que muchos de estos que están siendo despedidos no tendrán oportunidad de volver al béisbol organizado y que por ello se perderá mucho talento.
En la acera contraria están quienes ven esto como una oportunidad. Sí, una oportunidad de aplicar la selección natural al béisbol.
Sostienen que el despido masivo es lo mejor que ha podido pasar porque así sólo los verdaderos talentos se quedarán en el sistema y a la vuelta de un par de años se habrá elevado el nivel y habrá menos jugadores “de relleno”.
Además, es una nueva oportunidad de vida para estos jóvenes. Por todos es sabido las difíciles condiciones en las que viven los jugadores de ligas menores.
Reciben un pago muy bajo por mantener vivo el sueño de ir a las Grandes Ligas y ahora irán al mercado de trabajo a competir por un mejor sueldo en circunstancias más realistas.
Suena duro y crudo, pero el béisbol se volverá más selectivo. Y esa no es una mala noticia, después de todo. Sobre todo tomando en consideración la nueva realidad económica tras los efectos de la pandemia del COVID-19, cuyos alcances aún no se conocen en su totalidad.