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El discurso de Aitana Bonmatí en apoyo a Jenni Hermoso tras el beso de Luis Rubiales

Aitana Bonmatí se volvió viral luego del discurso que dio ante la UEFA en apoyo a Jenni Hermoso, quien fue víctima de un beso sin consentimiento por parte de Luis Rubiales
Aitana Bonmatí y Jenni Hermoso fueron compañeras en el FC Barcelona
Aitana Bonmatí y Jenni Hermoso fueron compañeras en el FC Barcelona / Quality Sport Images/GettyImages
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Aitana Bonmatí vive el mejor momento de su carrera, ya que además de haber ganado el Mundial de Fútbol Femenino 2023, fue reconocida por la UEFA como la Mejor Jugadora del Año. Y fue justamente en este discurso en el que aprovechó para apoyar incondicionalmente a su colega y amiga Jenni Hermoso, quien en la final del campeonato fue besada sin consentimiento por Luis Rubiales, el presidente de la Real Federación Española de Fútbol​.

La centrocampista del FC Barcelona agradeció el reconocimiento y enalteció a sus colegas, sin las cuales asegura no lo hubiese conseguido. Pero además aprovechó el momento para decir: "No están siendo unos momentos muy buenos en el fútbol español. Venimos de ganar el Mundial pero no se está hablando mucho de ello porque han pasado cosas que no me gustaría dejar pasar".

Después la española dejó en claro: "Como sociedad no debemos permitir que se haga abuso de poder en una relación laboral ni faltas de respeto" y finalizó diciendo: "Desde mi compañera Jenni, a todas las mujeres que sufren lo mismo, estamos con vosotras. Y ojalá que sigamos trabajando para que esta sociedad mejore".

El hecho dio la vuelta al mundo y despertó todas las alarmas en los altos mandos de la FIFA. Sobre todo después de que Hermoso lanzara un comunicado en el que afirmaba: "Me sentí vulnerable y víctima de una agresión, un acto impulsivo, machista, fuera de lugar y sin ningún tipo de consentimiento de mi parte".

Rubiales está suspendido de su cargo por un plazo de 90 días, aunque varias fuentes afirman que puede extenderse por más tiempo. Él, sin embargo, continúa afirmando que mantuvo una conversación previa con la futbolista en la que se acordó lo que harían.

Por lo anterior, el europeo aseguró en un discurso que no renunciaría, y en ningún momento pidió perdón por lo que hizo.