Dodgers deben otorgarle una extensión de contrato a Max Scherzer y blindar su rotación por años

Los Dodgers de Los Angeles dejaron claras sus intenciones de revalidar su título de campeones de la Serie Mundial de MLB cuando tomaron en un cambio a Max Scherzer.

El veterano, de 37 años de edad, y tres veces ganador del Cy Young era el mejor lanzador disponible en el mercado de cambios y potencia el cuerpo de abridores del manager Dave Roberts.

Después de un movimiento como ese, es de esperar que la gerencia de los Dodgers se plantee retener al derecho, que dio su permiso para la transacción de cambio y que será agente libre en este receso de temporada.

Posiblemente, en Los Angeles quieran ver cómo le va a Scherzer en lo que resta de campaña, pero sus números este año son suficientemente consistentes (balance de 8-4, 2.76 de efectividad y 147 ponches) como para tomar el riesgo.

Además, los Dodgers lo necesitan. Clayton Kershaw, lesionado en este momento, también será agente libre y Trevor Bauer está fuera indefinidamente por sus problemas legales.

Lo único que deben sentarse a decidir en Los Angeles es la oferta que pueden hacerle al veterano de 14 temporadas en las mayores. Viene de un contrato de 7 zafras y $210 millones con los Nacionales de Washington que le reporta este año un salario de 34.6 millones de dólares.

Los Dodgers tienen el músculo financiero para poner sobre la mesa una cifra que logre convencer a Scherzer de pasar al menos un par de temporadas con el club.