EL COACH | LeBron James pidiendo "respeto" al titularse con los Lakers fue un hecho insólito y ególatra
La grandeza y el legado de LeBron James en la NBA no están en discusión. El astro de Los Angeles Lakers se convirtió recientemente en campeón y MVP de Las Finales con tres organizaciones diferentes. Además, posee la mayoría de los récord individuales en postemporada y ha estado en más Finales que 27 franquicias de la liga.
James es uno de los jugadores más respetados de todos los tiempos, por lo que la forma en que lidió con su alegría tras haberse titulado con los Lakers dejó varias preguntas en el aire. LeBron cumplió su promesa a la leyenda del equipo, Kobe Bryant, de ganar el campeonato en su nombre y siguió escalando en la historia con registros personales inéditos.
Entonces, ¿qué quiso decir James cuando pidió respeto durante el festejo de los Lakers?
A LeBron no se le puede respetar más. Que haya podido meterse en la discusión del mejor jugador de la historia de la NBA junto a Michael Jordan ya dice mucho. La divinidad del ícono de los Chicago Bulls ha podido ser ligeramente quebrantada por los logros, talento y liderazgo del ahora todo terreno de los Lakers, por lo que haber pedido respeto se podría deducir como algo insólito y hasta ególatra.
"Sólo quiero respeto para todos en la organización, pero también quiero que me respeten", dijo LeBron en su discurso con un tono desafiante y pedante.
¿Qué quiere James? ¿Qué le digan que es el mejor de la historia? Pues, quizás ese momento jamás llegue; y no por sus registros personales, premios o títulos, sino porque Jordan fue el primer emblema internacional de la NBA, ganando seis campeonatos con una dinastía que ya fue merecedora de hasta un documental. Jordan fue un antes y un después en las liga a nivel de mercadeo e historia.
La mentalidad de Jordan, a su vez, es inigualable y el valor calidad-cantidad de sus logros lo ponen un escalón por encima de James.
No obstante, la comparación entre James y Jordan también podría ser errónea y atemporal. Son jugadores diferentes, que no deben ser puestos uno al lado del otro. Es como comparar a un Dios con un ser terrenal, sin mirar ni siquiera las estadísticas. LeBron es un jugador más completo, que no ha contado con equipos como los que tuvo Jordan en instancias decisivas y Jordan, por su parte, fue un killer en Finales con un nivel competitivo sólo comparable con el de Kobe Bryant.
"Todo el mundo sabe lo que amo a Michael Jordan. Uso el 23 por Jordan. Cuando me compré mis primeras zapatillas Jordan pensé que era invencible. Así que pueden decir lo que quieran y hacer todos los debates que quieran, pero mi respeto es el mismo", dijo James después del décimo séptimo título en la historia de los Lakers.
Por ello, no entendemos qué más respeto quiere James. Tiene la admiración de su familia, compañeros, amigos y hasta el cariño de una buena parte de la afición que lo ve como un símbolo social en favor de las minorías en Estados Unidos.
Sin embargo, este tipo de declaraciones sustentan el rechazo de muchos otros, que lo ven como un ególatra del cual no hay que festejar sus éxitos.
La historia pone a todos los atletas en su lugar, y el respeto cuando se tiene, no se pide.