EL RELEVISTA | Los Yankees deben concentrarse en sumar pitcheo abridor en el mercado de cambios

El 30 de julio, la fecha límite de cambios de 2021, no está tan lejos y en las oficinas de los equipos de la MLB trabajan intensamente para cuadrar los cambios de peloteros que le cambien la cara a la organización de cara a la recta final. Los Yankees de Nueva York están en lo mismo que sus 29 rivales y todo apunta a reforzar su pitcheo abridor para llegar fuertes a una posible postemporada.

Para la escuadra que dirige Aaron Boone es imperativo tener fichas duras en la rotación de abridores. Ahora mismo, cuando la ronda regular está terminando su tercer mes, solo tienen como una carta confiable para los duelos de alta intensidad a su as Gerrit Cole. Los números del derecho son impresionantes, destacando su efectividad de 2.33 con 123 ponches en 96.2 innings.

Luego del tirador de veloz recta es poco lo que se puede rescatar. La gerencia, seguramente, maneja información privilegiada con respecto a la salud del brazo de Corey Kluber (3.04 de efectividad en 10 salidas) y quizás estén confiando en su retorno para la parte final.

Más allá, empero, la incertidumbre campea. Luis Severino se lesionó en su recuperación y ahora va a tardar más su retorno; Domingo Germán ha cumplido pero no luce como una opción potable para ser segundo o tercer abridor en unos playoffs. La misma situación se repite con Jameson Taillon y Jordan Montgomery. Entre los tres últimos la efectividad global no baja de las cuatro carreras por cada nueve entradas y les han conectado la nada atractiva cifra de 34 jonrones (al 24 de junio).

¿Cuál es la mejor solución a la vista para esta situación? No hay que ser un adivino para apostar por un abridor de élite, que se convierta en un lugarteniente efectivo de Cole y que ayude a olvidar las dudas por el regreso de Kluber.

¿Opciones? Afortunadamente hay muchas en el mercado, pero Brian Cashman, gerente general de los Yankees, tiene que estar dispuesto a "pagar" algún posible acuerdo con buenos prospectos o asumiendo contratos muy altos en dinero.

El primer nombre que salta en los análisis es Max Scherzer. Con 36 años y una buena temporada 2021 (2.19 de efectividad en sus primeras 14 salidad) suena como un pitcher ideal para estos ansiosos Yankees. Detrás de Gerrit Cole sería una fuerza potente, que además sabe lo que es ganar pues levantó el trofeo de la Serie Mundial en 2019.

Eso sí, para traer a Scherzer a la Liga Americana, quizás tengan los Yankees que salir de un paquete de al menos dos buenos prospectos y quizás un relevista joven.

¿Es Scherzer la única opción? Por supuesto que no. Los Yankees también pueden preguntar por José Berríos, en los Mellizos de Minnesota, o Germán Márquez, en los Rockies de Colorado, En mayor o menor medida, estos jóvenes lanzadores pueden valer mucho pero a cambio pueden obtener una pieza en Nueva York más confiable que las que tienen en la actualidad para formar un buen tándem con Gerrit Cole.

También, si lo que quiere Cashman es no "gastar" mucho, hay lanzadores más "baratos" que sumarían cosas positivas. Son ellos Tyler Anderson (Piratas), Kyle Gibson (Rangers), Kenta Maeda (Mellizos) y Merril Kelly (Cascabeles). Pero con ellos la vía sería distinta. Pueden ser un cuarto abridor con miras a la postemporadas que vendría después de Cole, un recuperado Kluber y el mejor entre Germán, Severino, Taillon y Montgomery.