La realización del Juego de Estrellas es un despropósito de la NBA y podría traer consecuencias
Por Miguel Bonilla
La NBA anunció la semana pasada que el Juego de Estrellas de 2021 se disputará el próximo 7 de marzo en Atlanta, una decisión que no cayó nada bien en muchas de las estrellas de la liga.
Las críticas no sólo se basan en el riesgo que implica realizar el clásico partido en medio de la pandemia del COVID-19, sino que adicionalmente atenta contra del descanso de muchos de los mejores jugadores del torneo.
La decisión de la liga gira alrededor de lo económico, y esto no es un secreto, siendo algo duramente criticado por jugadores como Kawhi Leonard, quien afirmó luego de conocer la noticia que el colocar el dinero sobre la salud es una irresponsabilidad.
Asimismo, figuras de la talla de LeBron James y Giannis Antetokounmpo expresaron no tener la motivación para disputar el juego en este 2021, cuestionando que se le da prioridad a un espectáculo no competitivo sobre el descanso de las máximas figuras de la NBA.
Está claro que las pérdidas sufridas durante la pandemia para la NBA tienen que ser significativas, ya que no sólo se trata de la ausencia de los fanáticos pagando boletas, sino también del ajuste del calendario, forzando a recortar encuentros.
Aún está por verse si alguno de los seleccionados desiste de participar en el tan afamado evento, lo cual sería un duro golpe para las intenciones de la liga, que espera recaudar suficientes ganancias para recuperar sus arcas.
En Estados Unidos la vacunación frente al COVID-19 avanza de manera eficiente, pero se desconoce si en Atlanta se brindarán las garantías en términos generales para hospedar el evento.
El desarrollo del Juego de Estrellas de 2021 es un despropósito para la mayoría, y más allá de que todos esperan que pueda ser un éxito, realizarlo implica un riesgo tremendo que pueda dejar consecuencias.