LaMelo Ball perdió terreno y ya no es el favorito para ganar el premio Novato del Año

Hasta mediados de marzo no había duda alguna de que LaMelo Ball sería el ganador al premio al Novato del Año de la NBA, cortesía de su excelente rendimiento con los Charlotte Hornets, sin embargo su lesión de muñeca le ha costado18 presencias consecutivas y seguramente sus chances del galardón.

Curiosamente en ausencia de Ball, Anthony Edwards dio un salto de calidad para los Minnesota Timberwolves y creció significativamente en términos ofensivos, promediando desde entonces 22 puntos y 4.6 rebotes por juego.

Esto tiene a Edwards como el líder anotador dentro de los novatos con 18.3 puntos por partido, disputando 61 encuentros con Minnesota, 44 de ellos como titular. Ball por su parte está cerca de regresar a la campaña luego de dejar un promedio de 15.9 puntos, 5.9 rebotes y 6.1 asistencias por juego, conseguidos a lo largo de 41 juegos.

La regularidad es un factor fundamental a la hora de la escogencia de los premios individuales, por lo que el hecho de jugar al menos 20 juegos menos que Edwards podría terminar costándole sus oportunidades de ganar a Ball.

De disputar el resto de los juegos de la campaña Ball acumularía un total de 54 partidos, una cifra que históricamente, salvo pocas excepciones, es más que insuficiente para ganar el premio. En las últimas dos décadas solo ha sucedido en una oportunidad y fue Kyrie Irving con 51 partidos disputados en 2011-12.

Las casas de apuestas aún colocan a Ball como el máximo favorito, pero a no ser que consiga brillar rotulantemente en el resto de la temporada y Edwards baje su nivel, realmente sus chances parecen realmente bajas.