Las mejores firmas internacionales en la historia de los Yankees de Nueva York
Por Miguel Bonilla
En las Grandes Ligas han sido fundamental en las últimas décadas la llegada de talentos provenientes del exterior y allí los Yankees de Nueva York han sumado varios de los mejores jugadores de su historia reciente.
A continuación, las mejores firmas internacionales en la historia de la organización.
6. Gary Sánchez
Sánchez ha sido uno de los jugadores más importantes de los últimos años en el equipo, siendo un receptor de gran capacidad bateadora y buen brazo. El dominicano es el jugador que más rápido alcanzó los 100 cuadrangulares en la historia de la Liga Americana.
5. Hideki Matsui
Matsui llegó a la MLB como un profesional consolidado, ya que venía de ser una súperestrella del béisbol japonés. A sus 29 años firmó con los Yankees y unos años después fue fundamental en el decisivo Juego 6 de la Serie Mundial del 2009, siendo merecedor del MVP de la serie.
4. Orlando “El Duque” Hernández
Luego de desertar de Cuba en 1998, Hernández demostró con los Yankees por qué era una de las figuras que más llamó la atención en su país natal durante la época. Jugó en la organización por seis años, acumulando una marca de 61 victorias y 40 derrotas.
3. Robinson Canó
El reclutador Victor Mata se fijó en Canó en 2001 y esto fue suficiente para que el dominicano firmara con los Yankees un acuerdo como un prospecto interesante. Debutaría con el equipo en 2005 y durante nueve años sería uno de los bateadores estelares del equipo, quien además ganaría dos Guante de Oro.
2. Bernie Williams
A sus 17 años este puertorriqueño se sumó a la organización como un prospecto sin mucho ruido, pero estaba en la mira de los reclutadores por su increíble potencia física. Williams fue un bateador ambidiestro que superó los 2.000 imparables y además acumuló cuatro anillos de Serie Mundial.
1. Mariano Rivera
No hay un jugador con más juegos salvados en la historia de las Grandes Ligas y esta es una de las credenciales por las que el panameño está en el Salón de la Fama. Rivera en 1990 llegó como un prospecto sin mucho bagaje, pero con el paso del tiempo se convirtió en uno de los mayores ídolos de la modernidad.