¿La lucha por el récord de jonrones entre Sosa y McGwire en 1998 potenció el interés general en la MLB?
Por Mariana Moreno
El estreno del documental "Long Gone Summer", la historia de la batalla de jonrones en la MLB en 1998 entre Mark McGwire y el dominicano Sammy Sosa, ha reabierto algunos debates.
A la espera de una resolución para comenzar la temporada de 2020 en las Grandes Ligas, un tema de conversación gira en torno a cuál fue el impacto real de la batalla de jonrones de Sosa y McGwire.
¿Realmente potenció el interés general en la MLB?
En su momento sí. En 1998 no se hablaba de otra cosa. Tras años de castigo de los aficionados por la huelga de 1994, el béisbol volvía a ser una fiesta.
Ese verano, hasta quienes no seguían el béisbol estaban al tanto de la carrera por el record de cuadrangulares. La de 1998 fue de hecho la temporada más vista en la historia de la MLB con 1.9 millones de espectadores, 21% más que cualquier otra.
También hubo un incremento de afición en todos los parques de Grandes Ligas respecto a la temporada de 1995 de 20 millones de personas. El promedio estuvo por encima de los 70 mil espectadores.
Aunque ese promedio se mantuvo al año siguiente, los sucesos posteriores, entre ellos el escándalo por el uso de esteroides, volvieron a golpear a este deporte, que sigue luchando por posicionarse entre los aficionados.
La batalla de jonrones entre Sosa y McGwire sí le dio un segundo aire al béisbol, pero en la liga no supieron potenciar el efecto y mantener el interés de los espectadores.