Mets de Nueva York revelaron por qué no firmaron a Alex Rodríguez en el 2000
Por Mariana Moreno
En algún momento del receso de invierno del año 2000, los Mets de Nueva York contemplaron la idea de sumar a Alex Rodríguez a sus filas. El campocorto era en ese entonces agente libre.
"En el momento en que perseguíamos a Rodríguez, uno podía soñar con esa alineación, y la ofensiva hubiera sido increíble", contó esta semana el ex gerente general asistente de los Mets, Jim Duquette.
"Encajaba perfectamente porque en ese momento no teníamos un campocorto para los próximos 10 años", agregó.
Pero bastó una reunión con el agente de A-Rod, Scott Boras, para que los ejecutivos de los Mets se quitaran la idea de la cabeza.
Dos cosas los persuadieron de abandonar la búsqueda. Una, la cantidad de dinero a la que aspiraba el astro. Pero principalmente fueron unas exigencias de otro tipo las que les hicieron pensar que no encajaría en el club.
El ex gerente general de los Mets, Steve Phillips, no creyó que fuera una buena idea ficharlo. Le dijo a Mike Puma, del New York Post, que pensó que agregar a Rodríguez arruinaría la dinámica del clubhouse del equipo. Rodríguez le pidió a los Mets una oficina en el Shea Stadium y una carpa en los entrenamientos de primavera para vender su mercancía.
"Estábamos fuera antes de que la conversación sobre el dinero ocurriera", dijo Phillips.
Ese receso Rodríguez firmó un pacto de 10 años y $252 millones con los Rangers de Texas. En 2004 fue cambiado a los Yankees de Nueva York y los ayudó a ganar una Serie Mundial en 2009.
"Es sorprendente los movimientos que ocurren", dijo Duquette sobre el cambio de Rodríguez a los Bombarderos del Bronx. "Para ser honesto, no había forma de gastar 200 millones de dólares, pero si hubiera habido una conversación más razonable, digamos cerca de 150 millones, habría sido difícil decir que no".