Mike Tyson confesó qué enderezó su vida cuando dejó la cocaína y el alcohol
Por Florencia Freijo
Mike Tyson es una de las grandes leyendas de la historia del boxeo. El púgil estadounidense supo estar en la cima de la gloria con una trayectoria profesional exitosa, aunque también tocó fondo por su descontrolada personalidad que lo llevó por el camino de las adicciones y los excesos.
El hombre que se convirtió en el campeón de peso pesado más joven del mundo tuvo que lidiar con el exceso de fama y no lo logró: llegó un momento en el que todo se salió de control a tal punto que incluso terminó en el cárcel después de ser declarado culpable por abuso sexual.
El rumbo de "Iron Mike" cambió el día que se propuso dejar las drogas y el alcohol, así lo contó en una entrevista con Brendan Schaub en Below the Belt. "Dejé de tomar cocaína y beber. Ahora soy un hombre serio, todo cambió, toda mi vida", indicó.
Sin dudas, la combinación de alcohol y cocaína transformaban a Tyson, quien en uno de los momentos más críticos llegó a golpear a siete prostitutas en 2009.
"Estaba en la suite de mi hotel con siete mujeres, un gotero de morfina, mi cocaína, mi Cialis (como la Viagra), mi marihuana y mi Hennessy. Y toqué fondo porque me puse paranoico y pensé que estas mujeres estaban tratando de robarme y acosarme. Empecé a pegarles", confesó en declaraciones que retoma el medio Marca.
Afortunadamente, todo esto forma parte del pasado para el boxeador. Tyson decidió cambiar su vida, volver a estar en forma y regresó al ring a finales de 2020 en una pelea de exhibición con Roy Jones Jr., en la cual resultó ganador.