¿Noah Syndergaard no es un pitcher confiable para momentos de presión?

Tanto se aferraron los Mets de Nueva York a Noah Syndergaard que se negaron a entregarlo en el mercado de cambios. Tenían la esperanza de que su as los condujera a la postemporada.

Y durante un tiempo parecía que estaban en lo correcto. En la remontada de los Mets Syndergaard fue clave.

En un mes mejoró su efectividad de 4.25 a 3.71, y antes de la debacle del miércoles había hilado ocho aperturas de seis innings o más y permitido dos carreras o menos en cada una de sus últimas cinco salidas.

Pero ante los Cachorros de Chicago, en una serie crucial y cuando su equipo más lo necesitaba para salir del mal momento que parece alejarlo de los playoffs, “Thor” no pudo ser el líder que Nueva York requería.

Eso hace que los analistas y aficionados se pregunten si es confiable para los momentos de presión. Y tal vez sea injusto el cuestionamiento. Un mal día lo tiene cualquiera, pero los dedos acusadores apuntan a la falta de temple de Syndergaard.

Lo cierto es que en un choque vital para los Mets, Syndergaard tuvo la peor actuación de su carrera. Recibió tres cuadrangulares, permitió 10 carreras y fue relevado después de tres innings, un día antes de cumplir 27 años de edad.