¿Patriots tomaron la decisión correcta al no seleccionar a ningún quarterback cotizado en el draft?
Por Miguel Bonilla
El Draft de la NFL en 2020 dejó varias conclusiones para el futuro. Sin embargo fueron más las incógnitas que quedaron para los fanáticos de los New England Patriots. Esperaban que seleccionaran a un prospecto estelar para la posición de mariscal de campo, pero esto no sucedió.
¿Fue una buena decisión parte de los Patriots no escoger un quarterback en este proceso? Esta es la pregunta más importante en este momento al hacer el balance de lo hecho por el equipo.
Fueron 10 los escogidos en las siete rondas: El safety Kyle Dugger, el defensor Josh Uche, los apoyadores Anfernee Jennings y Cassh Maluia, los ala cerrada Devin Asiasi y Dalton Keene, el pateador Justin Rohrwasser, el tackle Justin Herron y los guardias Michael Onwenu y Dustin Woodard.
El balance en términos generales no fue malo. Pero no escoger a un mariscal de campo es algo que podría ser bastante cuestionable luego de la partida de Tom Brady, ya que por el momento esto indicaría que su apuesta será confiar en Jarrett Stidham y el veterano Brian Hoyer.
Poco después sumaron al novato J'Mar Smith como agente libre sin escoger en el draft.
Fueron cuatro los quarterbacks los escogidos en la primera ronda del draft actual, pero muchos rumores indicaban el último de ellos era del interés de los Pats: Jordan Love. Finalmente, Love fue agarrado por los Green Bay Packers.
Se especuló en un momento New England realizaría un cambio para conseguir una mejor selección y llegar a Justin Herbert o a Tua Tagovailoa.
Así, está claro que la idea del entrenador Bill Belichick bajo las circunstancias actuales parece estar encaminada a no desesperarse en la búsqueda de un mariscal de campo franquicia y su prioridad fue reforzar el equipo en las posiciones restantes en donde se necesitaba un relevo.
No tomar a un mariscal de campo solo explica que la intención fue realizar una reconstrucción. Pero si alguno en Foxborough piensa en competir han sido realmente conservadors.
Solo el tiempo dirá si Belichick tuvo razón o no.