¿Por qué Gleyber Torres podría ser cambiado por los Yankees?

Después de la eliminación en la campaña regular de 2023, los seguidores de los Yankees de Nueva York están a la espera de los grandes movimientos del equipo en el mercado de invierno de la MLB.

Son ya 14 temporadas sin avanzar hasta la Serie Mundial y la presión no hace sino aumentar de cara a la próxima zafra de las Grandes Ligas.

Y si bien todos están a la expectativa de las adquisiciones que pacte el equipo del Bronx, también tendrán que prepararse para ver partir a algunos jugadores que cuentan con el aprecio de la afición. Uno de ellos es Gleyber Torres.

El venezolano es finalista al premio Bate de Plata, que nunca ha conquistado en su carrera de seis años en las mayores. Se ganó la nominación después de dejar números de .273/.347/.453 con 25 jonrones y 68 carreras remolcadas e igualar un tope personal con 28 dobles.

En un año particularmente complicado para los Yankees desde todo punto de vista, fue el segunda base el bateador más regular y uno de los líderes de la ofensiva escoltando a Aaron Judge. Es por eso que hay quienes cruzan los dedos para que se quede en el Bronx.

También ese es el deseo del infielder de 26 años de edad, que sueña con ser un Yankee el resto de su carrera. Pero todo apunta a que el anhelo no se cumplirá, porque en Nueva York -aunque valoran su aporte de 2023 y elogian la madurez que ha adquirido- tienen muchas razones para cambiarlo.

Torres entrará en 2024 en su último año de arbitraje (proyectan que ganará más de $15 millones) y con compromisos salariales de peso con jugadores como Judge, Gerrit Cole, Carlos Rodón y Giancarlo Stanton, además de las firmas de estrellas que están obligados a hacer en este invierno, no parece haber un plan de hacerle una oferta de extensión.

Antes de perderlo a cambio de nada en la agencia libre del siguiente invierno, en la gerencia se moverán a incluirlo en un paquete de cambio. Y será uno muy bueno, porque su valor se ha incrementado con su sólida producción de 2023 y es una pieza que resulta apetecible para prácticamente cualquier equipo de MLB. Incluso se cree que puede ser clave en la negociación por Juan Soto.

Contra los deseos de Gleyber y de la afición neoyorquina de extender su permanencia en Yankee Stadium se presenta otro obstáculo, y es la irrupción de los prospectos en el infield, un movimiento avalado -e impulsado- por el propietario Hal Steinbrenner.

Anthony Volpe fue ratificado como titular del campocorto y Oswald Peraza es parte del plan en el cuadro interior, por lo que Torres no parece tener lugar en el corto y largo plazo. Su defensa no es su mejor arma y queda fuera de discusión la idea de mudarlo a otra posición. Tampoco es viable verlo como bateador designado mientras Stanton esté en el roster.

Todo este escenario lleva a una sola conclusión: es sólo cuestión de tiempo ver a Torres vestir un nuevo uniforme, pues su salida de los Yankees vía cambio puede concretarse en cualquier momento.