¿Por qué los Lakers no realizaron movimientos antes de la fecha límite de cambios?
Por Miguel Bonilla
El jueves 10 de febrero cerró la ventana de cambios en la NBA, una oportunidad que distintos equipos aprovecharon para reestructurar su plantilla de cara al resto de al temporada. Una de las organizaciones de las que se esperaban movimientos eran Los Angeles Lakers, pero finalmente no adquirieron ni dejaron ir a ningún jugador.
Son muchos los cuestionamientos ante esta decisión, en especial siendo un equipo que se construyó para ganar un campeonato y actualmente escasamente está peleando por puestos de "play-in", ubicados en la novena posición con marca de 26-30.
Si bien había formas en la que la organización pudiese adquirir algunas piezas, el gerente general Rob Pelinka apostó por la continuidad en lo que parece fue una decisión conjunta con el entrenador Frank Vogel, además de Anthony Davis y LeBron James.
Dentro de las razones para no realizar cambio alguno está el hecho de que los cambios para adquirir a Anthony Davis en 2019 y a Russell Westbrook en 2021, le significaron a la organización entregar varias futuras selecciones de draft. Por ejemplo entre 2022 y 2023 solo cuentan con una de segunda ronda.
Otra consecuencias de la construcción de Big Three es el poco espacio que tienen desde lo salarial, ya que más allá de cinco jugadores en la plantilla, los ocho restantes tuvieron que ser firmados bajo contrato mínimo, lo que incluso les significa pagar más de $43 millones en impuesto de lujo.
En especial el contrato de Russell Westbrook tuvo un impacto negativo en términos de flexibilidad para realizar algún acuerdo, recibiendo esta temporada alrededor de $44 millones. Su rendimiento a estado por debajo de lo esperado y esto solo hace ver su contrato como algo casi imposible de mover.
De momento los Lakers solo han realizado dos operaciones durante la campaña, la primera fue cambiar a Rajon Rondo a los Cleveland Cavaliers y la segunda firmar a Stanley Johnson desde la agencia libre por dos años.