¿Por qué los Cachorros cambiaron a Gleyber Torres?
Por Mariana Moreno
Los ejecutivos de los Cachorros de Chicago han dicho varias veces que no se arrepienten de haberle entregado a Gleyber Torres a los Yankees de Nueva York, pero seguramente algunos aficionados se preguntan todavía por qué lo hicieron.
Y en la medida en que los oseznos sigan sin reencontrarse con la fórmula ganadora, el cuestionamiento hacia este intercambio será más intenso.
Para mayor dolor, el venezolano Torres ha sido más que rendidor en el Bronx. En sus dos primeros años ha dejado números (.275, 62 jonrones, 167 carreras impulsadas) que ilusionan con estar en presencia del heredero del capitán Derek Jeter en Yankee Stadium.
El joven infielder de 23 años de edad parece destinado a ser el líder de los Yankees y la base del proyecto a largo plazo del equipo. Y también despuntaba con los Cachorros cuando fue intercambiado por el cerrador cubano Aroldis Chapman en 2016.
Su promedio de .297 fue uno de los mejores entre los jugadores de ligas menores de los Cachorros de Chicago en 2014. Y se destacaba en unas granjas envidiables, donde se formaron los jugadores que fueron clave para conseguir el primer título de Serie Mundial para los Cachorros desde 1908.
En el infield del equipo grande Torres tenía una seria competencia, con Javier Báez, Addison Russell y Kris Bryant. Y en medio de ese contexto, los Cachorros apostaron por el triunfo inmediato en su afán de romper con todas las maldiciones que tenían encima.
Esas fueron, fundamentalmente, las razones que los llevaron a desprenderse de su joya.
"Todavía valoro las cosas a largo plazo, pero aún veo cada oportunidad de ganar como algo sagrado", dijo el presidente de los Cachorros Theo Epstein cuando celebraba el título del 2016.
Después de todo Chicago consiguió lo que quería, ser campeón, aunque dos meses después Chapman estaba de regreso en Nueva York y el sistema de ligas menores se había quedado sin Torres.