¿Por qué Miguel Cabrera tiene el peor ritmo jonronero en su carrera en la MLB en 2022?
Por Mariana Moreno
Ha pasado más de un mes y 60 turnos al bate desde que Miguel Cabrera celebrara su último jonrón de esta temporada de MLB con los Tigres de Detroit.
Fue el 25 de julio, y ante los Padres de San Diego. Ese día el venezolano conectó su cuarto cuadrangular de la campaña de Grandes Ligas, la número 20 en su carrera.
La cifra tiene a muchos preocupados. Cabrera está en el tramo final de su trayectoria y ha anunciado su retiro al final de la campaña 2023.
Y es obvio que su capacidad de conectar jonrones ya no es la de antes. Hace un par de semanas se celebró el primer aniversario de la conquista de su jonrón 500 de por vida y hasta la fecha tiene 506.
En 10 de sus 20 temporadas consiguió al menos 30 bambinazos y dos de esas veces fueron más de 40 (44, los años en los que fue MVP: 2012 y 2013).
Cuatro vuelacercas es la cantidad más baja para el venezolano en una temporada en la que disputa al menos 100 juegos. Solo había dado menos en 2018, cuando una lesión puso fin a su campaña después de solo 38 partidos.
El paso de los años ha sido implacable con quien fue el bateador más temible de la Liga Americana hace una década. En 2016 fue la última vez que dio más de 30 jonrones (38) y desde entonces su mayor cantidad han sido los 16 de 2017 y los 15 que dio el año pasado.
Pero, ¿qué sucedió con el poder del astro de Detroit? La respuesta es simple: las lesiones, directa o indirectamente, lo han llevado a donde está ahora.
Sus molestias en la espalda y las lesiones crónicas en las rodillas le hicieron cambiar su manera de hacer swing en los últimas zafras y eso es lo que ha impactado su ritmo jonronero.