¿Por qué figuras como Nelson Cruz y Yadier Molina no han firmado en la agencia libre de la MLB?
Por Mariana Moreno
Los reportes de prensa dicen que han recibido mejoras económicas en sus ofertas como agentes libres, pero todavía Nelson Cruz y Yadier Molina no tienen contratos asegurados para la próxima campaña de MLB.
Varias razones explican la situación en la que se encuentran ambos veteranos latinoamericanos a pesar de ser unas estrellas. Entre ellas dos se destacan: su edad y las condiciones del mercado en las Grandes Ligas, sobre todo después de la campaña recortada por la pandemia en 2020 que se tradujo en pérdidas para los equipos.
Tanto Molina como Cruz han demostrado que pueden seguir jugando en las mayores; es sólo que sus aspiraciones no se ajustan a la realidad actual del mercado.
La principal piedra de tranca, en ambos casos, es la exigencia de un contrato por más de una temporada.
Nelson Cruz tuvo un gran año en 2020. Dejó una línea ofensiva de .303/.397/.595 con 16 jonrones y 33 carreras impulsadas en su segundo año con los Mellizos de Minnesota. Con esos números ganó el Bate de Plata por segundo año seguido y tercera vez en cuatro temporadas. Viene de ganar $14.3 millones en 2020 y en sus dos campañas con los Mellizos sus ingresos han sido de $26 millones.
Con 40 años de edad está pidiendo un pacto por dos zafras y se habla de que aspira a ganar unos $20 millones por temporada. Su principal obstáculo, más allá del riesgo que conlleva un contrato multianual a su edad, es que está prácticamente limitado al rol de bateador designado.
Por su parte, Molina ha asomado la posibilidad de retirarse si no consigue el pacto adecuado.
Con 38 años de edad, el receptor puertorriqueño sigue bateando bien (.262/.303/.359 en 42 partidos con 38 hits, dos dobles, cuatro cuadrangulares y 16 carreras remolcadas en 2020) y se mantiene en la élite entre los defensores de su posición.
De por vida batea para .281/.333/.404, ha ganado nueve Guantes de Oro, ha ido 9 veces al Juego de Estrellas y tiene dos anillos de Serie Mundial. Viene de un contrato de tres años y 60 millones de dólares.
Molina ha dejado claro que quiere retirarse con los Cardenales de San Luis, su equipo de toda la vida y con quienes mantiene negociaciones. También ha sido específico en sus aspiraciones: quiere un pacto por dos años y ese ha sido el principal escollo para alcanzar un acuerdo.
Es difícil saber si Molina y Cruz conseguirán lo que se proponen. Su edad, aunque no haya señales de declive en su juego y su condición física sea buena, atenta en contra de sus aspiraciones de conseguir un contrato por más de una temporada.