¿Puede Ronald Acuña Jr. renegociar su contrato con los Bravos de Atlanta si gana el MVP en 2023?
Por Mariana Moreno
Ronald Acuña Jr. parece haber salido en esta temporada de MLB decidido a olvidar todos los problemas físicos que lo limitaron en el pasado y dispuesto a refrendar la confianza que le tienen sus compañeros en Bravos de Atlanta.
Desde antes de la inauguración de esta campaña de Grandes Ligas se pronosticaba que el joven astro venezolano tendría la mejor actuación de su carrera y va enrumbado a cumplir el vaticinio
Acuña Jr., de 25 años de edad, está viviendo una temporada digna del MVP, con su liderato en la Liga Nacional en bases robadas (29), hits (92), carreras anotadas (60) y OPS (.979). Además tiene average de .331, el segundo mejor del viejo circuito, es tercero en dobles con 21, octavo en jonrones con 15 y sexto en impulsadas con 45.
Nada de eso, sin embargo, le servirá para aumentar de forma exponencial las cifras en su cuenta bancaria. El outfielder firmó en 2019, cuando apenas tenía 21 años de edad, un contrato que lo liga a la organización de Atlanta por un tiempo que puede prolongarse hasta el final de la temporada de 2028.
El pacto de 8 años y 100 millones de dólares fue muy criticado en su momento pues se pensó que el venezolano se precipitó en la decisión. Para Atlanta resulta muy rentable, pues por este año brillante apenas paga un salario de $17 millones.
El convenio establece opciones del club para las temporadas de 2027 y 2028 por $17 millones cada una que los Bravos seguramente ejercerán, dejando a la estrella bajo control del club por más tiempo.
Así las cosas, no será hasta 2029 cuando Acuña pueda ser agente libre, y para ese momento ya tendrá 31 primaveras. Si bien Aaron Judge acaba de demostrar que es posible conseguir un contrato récord a esa edad, el venezolano deberá mantenerse sano para aspirar a un acuerdo similar.
Renegociar el contrato no luce como una opción viable, incluso si Acuña consiguiera ganar este año el primer MVP de su carrera. Es una decisión que depende solo de la gerencia de Atlanta y no será fácil que acepten perder la ventaja económica que les da el acuerdo firmado en 2019.