¿Qué harán los Mets con Luisangel Acuña cuando Francisco Lindor se recupere?
Por Mariana Moreno
Carlos Mendoza, el manager de los Mets de Nueva York, estaba negado a llamar a MLB a Luisangel Acuña. No lo hizo cuando se lesionó Jeff McNeill, pero no tuvo otra opción cuando Francisco Lindor se lastimó la espalda.
A pesar de estar renuente, el movimiento le salió muy bien a los metropolitanos porque el prospecto ha estado bateando consistentemente desde su llegada a las Grandes Ligas.
Acuña conectó el sábado su tercer cuadrangular en 8 juegos, con 6 extrabases (dos dobles y un triple) y 6 carreras impulsadas, además de promedios de .385/.407/.885 y OPS de 1.292.
Con ese despliegue ofensivo y un par de buenas intervenciones defensivas, no es una sorpresa que reciba elogios de su manager. A Mendoza lo tiene asombrado la forma en que el prospecto ha respondido en juegos de alta presión.
“No creo que puedas predecir cómo reaccionarán los muchachos cuando los pongas bajo las luces. Las grandes luces. Parece y se siente como si hubiera estado con nosotros todo el año. No sólo con los jugadores, los entrenadores… entregándole los mismos mensajes en el nivel Triple A. Hay coherencia aquí. Eso es importante para seguir permitiéndole jugar de esa manera”, dijo Mendoza a SNY.
Ese aplomo es lo que llevará al estratega a una encrucijada. La adición de Acuña ha sido clave para mantenerse firmes en la batalla por la clasificación, pero esperan reactivar a Francisco Lindor el martes y llegará el momento de tomar decisiones.
La titularidad del campocorto está reservada al astro puertorriqueño, pero Mendoza tendrá que conseguirle un lugar a Luisangel en el lineup para no perder su aporte con el madero. Y el joven está en el roster de 40 por lo que es elegible para los playoffs y sería una buena idea conservarlo para esas instancias.
A McNeill tal vez no lo vean regresar por la fractura, pero José Iglesias, el otro que ha estado jugando a diario en el cuadro interior, también está encendido. Lo más sensato podría ser que Acuña se rote en la segunda base con Iglesias y que incluso se atrevan a darle algo de acción en el outfield, donde también puede jugar.