¿Quién es Ethan Salas, el nuevo gran prospecto venezolano de la MLB?

Ethan Salas ha sido uno de los nombres propios entre los prospectos latinos en 2023. Primero por su millonaria firma de $5.6 millones al comenzar el año. Luego por el pronostico que hace MLB Pipeline, que lo ubica entre los primeros cinco mejores prospectos para el 2024 en MLB, siendo el primero que lo consigue en la historia con apenas 17 años. Y ahora vuelve a ser noticia al reportarse que será ascendido a la sucursal Doble A de los Padres de San Diego.

¿Dónde nació?

Ethan Salas nació en Florida el 1 de junio de 2006. Aunque su familia se fue a vivir a Caracas, Venezuela cuando tan solo era un bebé. Es hijo de un ex pelotero, José Antonio Salas, que tuvo experiencia de siete temporadas en ligas menores (con la organización de los Bravos de Atlanta), y también jugó en el béisbol venezolano con los Leones del Caracas y Tiburones de La Guaira.

Su hermano José Antonio Salas, tiene 20 años de edad y pertenece a la organización de los Mellizos de Minnesota, formó parte del cambio que llevó a Luis Arráez de la ciudad gemela a los Marlins de Miami.

¿Cuáles son sus atributos?

Los scouts de MLB lo catalogan como un futuro jugador de las cinco herramientas: bateo, fuerza, defensa, velocidad y buen brazo. Algo que es extraño de encontrar en un receptor.

Es un bateador de mucho contacto, y a su vez domina la zona de strike, algo que demostró en su paso por la sucursal Clase A de los Padres, dejando promedio al bate de .267 y OBP de .350. Su poder salió a flote con sus nueve jonrones en 48 juegos, que lo ayudaron a exhibir un OPS de .837.

Es tal la expectativa que tiene la gerencia de San Diego en el joven venezolano que hicieron que Salas trabajara con jugadores de Grandes Ligas, como Yu Darvish, en los primeros bullpens del año, debido a que sus habilidades de recepción, bloqueo de bola, rapidez con las manos, comunicación con el pitcher, y movimiento general, detrás del home, ya son muy avanzadas.

¿Por qué genera tanta expectativa?

Los Padres de San Diego pagaron $5.6 millones por él, en el proceso de firmas de enero. La organización californiana tenia un presupuesto de $5,825,500 para las firmas de este año, y decidieron gastarse casi por completo este dinero en un solo jugador, con tal de quedarse con el joven receptor. Desde San Diego aseguran que valió la pena hacer esa inversión en él.