¿Quién es Juwan Howard, el entrenador que rechazó a los Lakers?

La búsqueda por el nuevo coach de Los Angeles Lakers continúa de cara a la temporada 2022-23 de la NBA y si bien para muchos entrenadores sería una oportunidad invaluable, este no parece ser el caso de Juwan Howard, quien rechazó la idea pese al interés de la organización en sus servicios.

Este entrenador de 49 años es bien conocido no solo por su rol como coach de los Michigan Wolverines en la NCAA, sino también por su pasado como jugador de la NBA. En los años 90s consiguió ser uno de los grandes referentes de los Washington Bullets, sumando una selección al equipo ideal de la NBA en 1996 y un llamado al Juego de Estrellas con tan solo 22 años.

Su carrera lo mantendría como un jugador de rol muy rendidor, promediando en su primera década en la liga 17.8 puntos y 7.4 rebotes por partido. En adelante las cosas no andarían muy bien para él en lo individual, sumando cada vez menos minutos y terminando en un rol en lo profundo de la banca.

Curiosamente sus mayores éxitos desde lo colectivo llegaron hacía el final de su periplo en la liga, ganando dos campeonatos como parte de la nómina del Miami Heat en 2012 y 2013. Allí por supuesto jugó junto a LeBron James, quien habría sido consultado ante la idea de trabajar bajo las órdenes de su ex compañero, algo que vio con buena cara el "Rey".

Tras su retiro de las canchas asumió el papel de entrenador asistente en el Heat hasta 2019, cuando recibió una oferta para ser el coach principal de Michigan en la primera división de la NCAA. De momento ha tenido un destacado rol con un récord de 61-32, llegando hasta el "Elite Eight" y el "Sweet Sixteen" del campeonato nacional en sus dos participaciones.

Sus razones para rechazar a los Lakers son bastante claras según el reporte realizado por ESPN al respecto y se trata de que pretende dirigir a sus hijos en Michigan, Jace en su tercer año y el menor, Jett, quien debutará en la NCAA la próxima campaña.

Parte de la consideración de Howard también se debió a que jugó junto a Rob Pelinka, gerente general de los Lakers, en su etapa universitaria y aún hoy son buenos amigos, pero ni eso hizo que el dos veces campeón de la NBA dejara atrás sus planes.