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¿Quién es Federico Chiesa, el inminente fichaje del FC Barcelona?

Todas las noticias aseguran que muy pronto los blaugranas ficharán oficialmente a Chiesa, un talentoso jugador italiano cuyo padre también fue una figura del deporte en ese país
Federico Chiesa debutó con la selección absoluta de Italia el 23 de marzo de 2018
Federico Chiesa debutó con la selección absoluta de Italia el 23 de marzo de 2018 / Masashi Hara/GettyImages
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El FC Barcelona sigue analizando nuevas incorporaciones a su plantilla con el objetivo de tener una temporada 2024-25 exitosa, algo que no sucedió en la pasada. En este marco, el italiano Federico Chiesa suena como el próximo integrante de los blaugranas.

Los medios españoles afirman que el actual jugador de la Juventus ya dio el "ok" para comenzar a lucir la camiseta culé, luego de que recibiera otras ofertas. Ahora es la institución española la que debe ajustar números, sobre todo teniendo en cuenta que la intención es pagar lo menos posible por su compra.

Chiesa nació el 25 de octubre de 1997 en Génova, una ciudad ubicada dentro de la región de Liguria. Su padre Enrico Chiesa es un ex futbolista profesional y miembro de la selección absoluta de Italia, por lo cual su cercanía con el deporte sucedió desde niño.

El debut de Federico con la camiseta nacional de su país se produjo el 23 de marzo de 2018 en un partido frente a Argentina. El primer gol convertido por el versátil atacante llegó el 18 de noviembre de 2019 ante Armenia, equipo al que Italia le ganó por una goleada 9-1, y además tuvo el privilegio de salir campeón de la Eurocopa 2020.

Teniendo en cuenta que el centrocampista es aún muy joven, estuvo hasta ahora en la Fiorentina y en la Juventus. Es este último equipo el que facilitaría este año su salida desde el punto de vista económico, para que pueda dirigirse a España.

"Tuve una carrera algo cuesta arriba siendo un niño. A los 13 años pasé por un mal momento", contó una vez Chiesa al medio Marca. Además detalló sobre sus inicios: "Veía a mis compañeros mejorar física y técnicamente, jugar todos los domingos, mientras a mí me costaba mantener el ritmo y tuve que 'bajar' a jugar con los de un año menos para poder tener minutos. Fue tan duro que pensé en dejarlo".

Por suerte el trasalpino decidió continuar con su carrera, y al respecto contó: "Con determinación, la ayuda de mis padres y de un entrenador que me hizo crecer mucho a nivel personal, comencé a considerar el entrenamiento diario como mi desafío personal y logré superarlo".