¿Quién sería el manager perfecto para los Yankees en 2024 si Aaron Boone es despedido?
Por Mariana Moreno
Los Yankees de Nueva York han mostrado en esta temporada de MLB su peor versión en décadas y un ejemplo de ello es la racha de 9 derrotas que no sufrían desde 1982.
En las Grandes Ligas están a la expectativa de los movimientos que esta crisis puede traer como consecuencia, y el pronóstico es que el manager Aaron Boone será el primer sacrificado.
Boone ha estado al frente del equipo del Bronx desde 2018 y aunque ha tenido un récord positivo no ha podido cumplir la promesa de llevar a los Mulos de regreso a la Serie Mundial. Si antes eso pesaba sobre su cabeza, el fracaso de 2023 significará su salida de la organización.
El propietario del equipo, Hal Steinbrenner, ya había adelantado que ese era un riesgo si el grupo no conseguía revertir el mal arranque de campaña.
Hay una lista larga de candidatos para reemplazar a Aaron Boone en el banquillo de Nueva York, empezando con algunas opciones internas como el coach de banca Carlos Mendoza o el coach de tercera Luis Rojas.
Si bien sería recomendable alguien con conocimiento de la organización, es probable que la búsqueda comience afuera para completar un cambio. En medio de la crisis se ha mencionado incluso la posibilidad del regreso de Joe Girardi, el último manager campeón con los Yankees.
Don Mattingly, leyenda de la franquicia y con amplia experiencia como dirigente, también se ha mencionado como una opción, al igual que Buck Showalter, Paul Molitor, el ex lanzador David Cone y Raúl Ibáñez. Entre todos, es la candidatura de Joe Espada la que se destaca.
El puertorriqueño, de 47 años de edad, ha sido entrevistado para el cargo con otras organizaciones, pero se ha mantenido como coach de banca de Dusty Baker con los Astros de Houston, una organización con la que ha sido campeón de la Serie Mundial, y también tiene experiencia con otros equipos como técnico.
El propio Baker ha dicho que Espada merece la oportunidad de dirigir en las Grandes Ligas y es cuestión de tiempo para que en Nueva York se abra una vacante.