La radiografía del slump de los Yankees de Nueva York después del Juego de Estrellas

En la primera parte de esta temporada de la MLB, si había algo que se decía de los Yankees de Nueva York era que parecían imparables.

Iban con ritmo de establecer un récord de victorias en las Grandes Ligas cuando llegaron con balance de 64-28 al Juego de Estrellas. Era el mejor del circuito. Pero desde entonces, los Yankees tienen marca de 8-17 y acaban de perder su quinta serie consecutiva. Esto no sucedía en el equipo del Bronx desde el 2015.

Las alarmas están encendidas, mientras tratan de encontrar una explicación. Y no, no es la maldición de Joey Gallo.

La primera clave para entender esta mala racha está en las lesiones. Luis Severino, Michael King, Giancarlo Stanton, Matt Carpenter y ahora DJ LeMahieu y Clay Holmes han ido cayendo uno a uno con problemas físicos que han impactado el rendimiento del equipo.

A eso hay que sumar algunas decisiones, como la salida de Jordan Montgomery, que dejó desbalanceada a una rotación de abridores que ha tenido en Gerrit Cole a un as con muchos altibajos.

La llegada de Frankie Montás debería ayudar a equilibrar la carga, pero el dominicano no se ha visto particularmente deslumbrante con su nuevo uniforme. Y el relevo, lleno de lanzadores lastimados y con Ron Marinaccio y Clarke Schmidt en Triple A, también perdió fuelle.

El cambio de Gallo estaba cantado, y queda evidenciado que era la presión de jugar en Nueva York la que no le permitía mostrar su potencial. Pero quedó Aaron Hicks, que no consigue la manera de producir.

Hicks, con problemas defensivos que han sido costosos, tampoco ayuda con el madero: está bateando para .218/.339/.305 con 13 extrabases (6 jonrones) y solo ha impulsado 32 anotaciones.

Josh Donaldson tampoco ha sido el bateador que se esperaba. Ciertamente estuvo conectando bien la pelota después del receso del Juego de Estrellas, pero de nuevo cayó en un bajón que le tiene con promedios generales de .223/.305/.384. También ha bajado el ritmo Anthony Rizzo, cuyos problemas en la espalda lo han afectado, además de afrontar la ausencia de Stanton.

LeMahieu estaba encendido antes de lastimarse el pie y el más constante, sin duda, sigue siendo Aaron Judge. Aunque en la última semana tiene average de .167, el slugger sigue mostrando poder y lleva dos jonrones en 7 juegos. pero solitarios ambos.

Una vez más a los Yankees de Aaron Boone les está costando anotar carreras (pasaron 34 innings consecutivos sin cruzar el plato). No sólo porque falta el batazo con corredores en circulación, también la forma en la que corren las bases ha tenido impacto. Esto se ha magnificado con el bajón del relevo, que no ha podido preservar ventajas después del séptimo inning.

A Boone le queda mucho trabajo por hacer y tendrá que seguir buscando el movimiento que ayude a cambiar la situación, al menos mientras regresa Stanton.