Robinson Canó confesó que lloró y sintió depresión durante su segunda suspensión por dopaje en la MLB
El jugador dominicano de los Mets de Nueva York, Robinson Canó, confesó todo lo que padeció por haber sido suspendido por la MLB en 2020 debido al uso de sustancias prohibidas, cayendo en una depresión de la cual le costó salir.
Canó, quien ahora está luchando su titularidad con los metropolitanos, aseguró que antes de llegar a los entrenamientos del equipo contactó a sus compañeros Pete Alonso, Jacob deGrom, Max Scherzer, Brandon Nimmo y Francisco Lindor para disculparse por su error.
"Los llamé para pedirles disculpas por lo que pasó. Como jugadores veteranos merecen respeto", dijo Canó en exclusiva para el New York Post.
Canó fue suspendido por 162 partidos de la temporada de 2021, pero aún le quedan dos años de contrato con los Mets, que le deben 48 millones de dólares.
"Fue un momento muy difícil. Disculparte y darle la cara a tus compañeros es más difícil que jugar béisbol. Tú no preparas un comunicado. Tienes que sentirlo de corazón. No quería ser una distracción para mis compañeros, porque todos queremos ganar".
Canó regresó en 2021 a San Pedro de Macorís, donde pasó su tiempo suspendido, aprovechando para jugar en la LIDOM.
"Ahora sé lo que sienten las personas con depresión. Nunca lo hablé con nadie. Siempre he sido una persona que sonríe. No quería que mis hijos me vieran así. A veces lloré viendo los partidos en televisión y sabiendo que no podía estar ahí", sentenció.