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SIN EQUIPO | El shift defensivo funciona pero convierte al béisbol en el deporte más predecible del mundo

El shift defensivo llegó para quedarse en el mundo del béisbol
El shift defensivo llegó para quedarse en el mundo del béisbol / Doug Pensinger/Getty Images
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El béisbol está atravesando por un proceso complejo, ya que los equipos de las Grandes Ligas están implementando una serie de estrategias que en su mayoría son efectivas, pero terminan resultando en algo incómodo de ver para muchos fanáticos.

El shift defensivo es una estrategia que usan los managers para determinados bateadores, quienes se especializan en conectar la bola hacia una determinada zona del campo, pero para los que tenemos años viendo béisbol, resulta en casi una blasfemia ver hasta 4 jugadores cubriendo el terreno entre primera y segunda base para enfrentar a un toletero zurdo.

Una jugada de shift defensivo en el Coors Field
Una jugada de shift defensivo en el Coors Field / Justin Edmonds/Getty Images

Los especialistas de la sabermetría se apoyan en los números para apoyar el shift, pero nunca lo radical es bueno y este tipo de acciones del “béisbol moderno” están convirtiendo el juego de pelota en una disciplina sumamente aburrida y monótona.

No está mal que un deporte evolucione pero todo debe hacerse con una justa medida, ya que en este caso se está logrando que muchos adultos dejen de darle seguimiento a la MLB. Algo grave si tomamos en cuenta que fuera de Estados Unidos, el Caribe y parte de Asía, el béisbol es un deporte con muy pocos espectadores.

Más que como periodista, esta crítica la hago como fanático que desde niño ha disfrutado de la emoción de las Grandes Ligas, y en los últimos años, más allá de la gran cantidad de jonrones por las nuevas pelotas que se están usando, el béisbol está demasiado predecible.

Las estadísticas y proyecciones están hechas para ayudar a que cada equipo logre estudiar de mejor manera al equipo rival, pero tenemos que recordar siempre que los jugadores no son robots ni los managers son computadoras. El humano tiene que seguir mandando en el campo basado en la emoción, los sentimientos, el vértigo y la necesidad de sorprender al rival con las acciones que hemos visto toda la vida, como por ejemplo un toque de bola con hombre en tercera base en el noveno inning.

La discusión entre periodistas y fanáticos no va a parar por el tema de las nuevas estrategias, pero lo importante es que quienes manejan el béisbol sepan implementar esta serie de movimientos con cautela, sin desvirtuar un deporte que le ha costado muchísimo poder ganar aficionados en distintas partes del mundo.

Es cierto que un equipo tiene el derecho de ubicar a sus jugadores como mejor les parezca, pero que la idea de sacar outs no destruya a un deporte que le ha brindado tantas emociones a Venezuela, República Dominicana, México, Cuba y Puerto Rico.