Damian Lillard es una estrella de la NBA, una jugador alrededor del cual armar un equipo con aspiraciones de ganar el campeonato. Su presente en los Portland Trail Blazers no es el mejor. Además de estar fuera por una cirugía, el equipo de Oregon está sumido en malos resultados, lejos de la clasificación y hay versiones sobre el descontento del base con la organización.
No son pocos los equipos que están interesados en obtener a Lillard, pero si hay uno que lo recibiría con los brazos abiertos es Philadelphia 76ers. En la escuadra de la Conferencia Este tienen a una buena ficha para intentar un cambio en Ben Simmons, pero aún deberían entregar más para obtenerlo.
¿Es posible que Damian Lillard y Bradley Beal acabaran en Philadelphia 76ers? Así sería el traspaso:https://t.co/lrkb3lG1cW
— Blog de Basket(.)com (@BlogDeBasket) January 14, 2022
Suponiendo que en "Philly" hagan las diligencias debidas para sumar a Lillard a su roster, la siguiente tarea es encontrar la vía más rápida y efectiva para engranarlo en su sistema.
Lillard podría ser el amo y señor del balón en los 76ers. Esta sería la principal ventaja porque además de quitarle un poco de presión a Joel Embiid para asumir el ataque, puede formar con el camerunés una efectiva dupla. Además, siendo un gran asistidor (average anual de 6.6 asistencias por partido) el pívot puede recibir mejores balones para atacar.
Además, los 76ers adquirirían mucho poderío como equipo. Juntar a Lillard con Embiid, Tobias Harris y compañía le daría a la escuadra que dirige Doc Rivers la etiqueta de favorito para el título.
Joel Embiid tiene 7 partidos seguidos anotando al menos 30 puntos y se encuentra a uno del récord de Allen Iverson en los 76ers??
— FanSided ES (@FanSided_ES) January 11, 2022
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Las desventajas para los 76ers de sumar a alguien como Lillard pasan por el costo que significaría sumarlo a su roster. Además de sacarse de encima el contrato de Simmons quizás tengan que salir de un prometedor Tyresse Maxey más dos selecciones futuras de primera ronda en el draft.
Otra posible contra para este cambio es que no hay garantías de tranquilidad en el vestuario con la llegada de "Dame". No es un jugador con historial conflictivo, eso es claro, pero hay que ver cómo asume su entrada a un club en el que no será la principal estrella de entrada.