¿Los Yankees acertaron al nunca interesarse por Carlos Correa?

Desde que dejaron ir a Didi Gregorius en la agencia libre de MLB en 2020, los Yankees de Nueva York han tenido problemas con el campocorto.

Pero ni siquiera el fracaso del venezolano Gleyber Torres o las críticas que recibió Isiah Kiner-Falefa en 2022 los llevó a contratar a alguno de los siete torpederos elite que han estado disponibles desde 2021 en la agencia libre de Grandes Ligas.

A pesar de que en ambos recesos hubo rumores que vincularon al equipo del Bronx con el campocorto Carlos Correa, nunca estuvieron cerca de firmarlo. Y los acontecimientos de las últimas semanas parecen dar la razón a la oficina encabezada por Brian Cashman.

El talento de Correa es innegable. Fue un jugador clutch en sus años con los Astros de Houston, sobre todo en postemporada. Ganador del Guante de Oro en 2021, sus estadísticas defensivas volvieron a estar al tope la campaña pasada y su ofensiva volvió a ser sólida, con promedios de .291/.366/.467 y 22 jonrones en 136 juegos.

Pero fueron otros obstáculos los que alejaron a Correa del Yankee Stadium, más allá del escándalo de robo de señas y los antecedentes de resquemores con los peloteros de Nueva York. Uno es su valor. El boricua siempre aspiró a un contrato de 10 temporadas y más de 300 millones.

Tanto la suma como la duración estaban fuera de los cálculos de los Yankees, que buscan quedar por debajo del umbral del impuesto al lujo y además tienen puestas sus esperanzas en dos prospectos del campocorto: Anthony Volpe y Oswald Peraza, cuyo desarrollos han estado esperando y por eso dejaron pasar a torpederos élites en el mercado.

El otro tema es la salud de Correa, algo que quedó en evidencia este invierno. Hay preocupación de las implicaciones a largo plazo que pueden derivar de una cirugía en su tobillo derecho en 2014, cuando era un prospecto en las granjas de los Astros.

En su carrera en las mayores el campocorto estrella ha tenido varias lesiones, pero ninguna relacionada con esta intervención. Sin embargo, los Yankees –como luego sucedió con Gigantes y Mets- prefirieron no correr el riesgo.

Por su posición recibieron muchas críticas, tanto el invierno pasado como en este receso. Pero finalmente los Yankees demostraron que acertaron al nunca interesarse por Carlos Correa.