¿Qué pasaría si Rafael Devers no acepta mudarse de la tercera base de los Medias Rojas de Boston?

Rafael Devers entrará en acción con los Medias Rojas de Boston en la Liga de la Toronja a comienzos de la próxima semana y faltando muy poco para el Opening Day de la temporada de MLB.

El tiempo corre y muy pronto el equipo tendrá que afrontar el momento de decidir cuál será el rol de la estrella dominicana en la campaña de Grandes Ligas. Firmaron a Alex Bregan y el plan es que se quede en la tercera base, pero en dominicano no está dispuesto a abandonar su posición.

La postura de Devers ha sido inflexible, pero no tiene la última palabra. El manager Alex Cora lo ha dicho una y otra vez.

“He respondido esta pregunta muchas veces y voy a dar la misma respuesta: Tomaremos la decisión cuando sea necesario”, afirmó Cora al portal de MLB.com. “Hay mucha competencia. La versatilidad y el atletismo serán clave, y nos llevaremos a los mejores 26 jugadores a Texas. Vamos a tener nuestra mejor alineación defensiva y ofensiva para el primer juego de la temporada”.

Devers estará como bateador designado en sus primeros partidos de la primavera, aunque ha estado practicando en la tercera base. Pero los periodistas que cubren a los Medias Rojas creen que no podrá evitar la mudanza y temen las consecuencias de esta resolución.

“Creo que si llegamos a la última semana de los entrenamientos de primavera y los Medias Rojas acuden a él y hacen oficial que va a comenzar el año como su bateador designado, todos deberían abrocharse el cinturón”, dijo Sean McAdam de MassLive. “Porque no creo que Devers haya cambiado de opinión en lo que respecta a sus sentimientos sobre renunciar a su posición”.

El quisqueyano no podrá hacer nada más que evidenciar su desagrado. Finalmente tendrá que plegarse a la decisión de Cora. Sin embargo, es obvio que como líder del vestuario y principal figura del equipo merece respeto y lo recibirá en la conversación.

Tendrá que entender que es lo mejor para el conjunto -que gana solidez en la defensa con un Guante de Oro como Bregman en la antesala- y también para él, que ha batallado con dolencias en los hombros en las últimas temporadas y que si pasa a otra posición, sea como inicialista o como bateador designado, puede concentrarse en aportar con la ofensiva sin preocuparse por su físico.

También como líder debe dar el ejemplo ante el resto de sus compañeros y acatar la decisión del manager, siguiendo el consejo que le acaba de dar una leyenda como David Ortiz de “dejar de lado el ego”. No tiene que gustarle y probablemente le cueste adaptarse, pero tendrá que esperar que pase esta temporada para evaluar opciones.

Puede que Bregman se salga del contrato y se abra la puerta a un eventual regreso a la antesala, o puede que el dominicano se atreva a pedir un cambio, pero esto no será sencillo de conseguir.

Apenas está en su segundo año de un contrato que termina en 2043 y al que le resta un pago de más de 280 millones de dólares. Boston tampoco estaría dispuesto a salir de su principal figura, por lo que se avecinan tiempos complicados con varias negociaciones internas.