¿Qué tiene qué pasar para que los Medias Rojas de Boston despidan al manager Alex Cora?

Con el triunfo en la serie contra los Yankees en Nueva York, Alex Cora tuvo un respiro. Pero eso no bastó para que cesara la presión que ha estado soportando por la mala situación de los Medias Rojas de Boston en esta temporada de MLB.

Los patirrojos tienen tres campañas quedándose fuera de los playoffs de Grandes Ligas y los movimientos que hizo la gerencia durante el invierno para reforzar al equipo no bastaron para que Cora los llevara a la pelea por el banderín.

Están relegados al penúltimo lugar de la tabla, con récord negativo de 32-35; han perdido 17 de los 23 juegos que se han definido por una carrera y lideran el circuito en errores colectivos con 55. Todo eso ha ido sumándose para que desde Boston empiecen a levantarse voces que piden el despido de Cora.

De momento la desvinculación con el boricua no parece que sea una decisión inminente. Consultado sobre el tema, el gerente Craig Breslow recordó que están en medio de una extensión de contrato de tres años y 21.7 millones de dólares que pactaron en julio de 2024 y que los ata hasta 2027.

“Obviamente nos comprometimos con Alex”, le dijo Breslow  a Chris Cotillo de MassLive la semana pasada. “Vamos a cumplirlo. Ahora mismo, se trata de asegurarnos de hacer todo lo posible para que los 26 jugadores de nuestra plantilla nos ayuden a ganar la mayor cantidad de partidos posibles”.

Posiblemente, el alto mando de los Medias Rojas no despida a Cora este año para no agregar un drama más a todo lo sucedido desde la primavera con Rafael Devers, la lesión de Triston Casas y otros eventos. Pero tal vez durante el receso de invierno sea más propicio para el alto mando tomar una decisión.

Dependerá, de seguro, de cómo terminen los patirrojos esta temporada. Si consiguen remontar y se acercan a los puestos de clasificación la discusión se archivará, pero de lo contrario se mantendrá la presión hasta que vean la salida del manager que los llevó a ganar la Serie Mundial de 2018. También es un elemento importante que aparezca un candidato digno de llevar las riendas de uno de los equipos de mayor tradición en la MLB.