La 2024-2025 resultó una montaña rusa de emociones para un Luka Doncic quien empezó en el que era su equipo de siempre en la NBA, Dallas Mavericks, y acabó en Los Angeles Lakers, a los que no pudo ayudar a pasar de la primera ronda de los playoffs.
De hecho, tras la eliminación del popular club de Hollywood versus Minnesota Timberwolves, el cinco veces All Star reconoció que su mediático traspaso a comienzos de febrero, donde Los Angeles entregó como retorno, entre otros, a Anthony Davis, hizo mella en su cabeza.
“Estoy mentalmente algo agotado por todo lo que ha pasado. Sé que mucha gente no me creerá, pero así es. Creo que ahora es momento de procesar todo”, señaló Luka en Bleacher Report.
Doncic viene de sus primeros playoffs con Lakers, luego de guiar a los Mavs a las Finales de la NBA en el curso anterior. A pesar de que la relación con la franquicia texana se había deteriorado en los meses previos al traspaso, no dudó en admitir que dicho equipo ocupa un lugar muy importante en su corazón.
"Dallas fue mi hogar durante casi siete años. Sentía que allí era mi hogar. Ahora, en Los Angeles intento construir un nuevo hogar y cada día me siento más cómodo", acotó el Wonder Boy, quien sabe que enfrenta un panorama de mucha más presión, ya que debe ayudar a la entidad de amarillo y púrpura a conseguir el anhelado anillo número 18 en su historia.
Por otro lado, el futuro del crack esloveno con los Lakers sigue en el aire, dado que será elegible para firmar un contrato de hasta cuatro años y 230 millones de dólares a partir del 2 de agosto, pero aún no ha tomado la decisión sobre qué hacer.
Si no pacta la extensión, Luka puede probar la agencia libre en 2026, lo que quizás obligue a la gerencia angelina a meditar si colocarlo o no en el mercado en pro de no verlo partir "gratis".