Conforme han pasado los días el debate ha perdido intensidad, pero no ha desaparecido de la MLB. Todavía se menciona la posibilidad de que las diferencias de Rafael Devers con los Medias Rojas de Boston sean irreconciliables y lleven a considerar la salida por la vía del cambio.
Un par de veces desde la pretemporada de Grandes Ligas el dominicano de 28 años de edad se ha enfrentado con la gerencia de los patirrojos y la última controversia incluso obligó a la intervención del propietario John Henry.
Devers tiene la esperanza de que el conflicto quede atenuado por su explosión ofensiva de los últimos partidos, pero será inevitable que se sigan evaluando los pro y los contra de su potencial traspaso, un movimiento que será muy difícil de concretar para el ejecutivo Craig Breslow.
1. Su contrato multianual millonario
El principal obstáculo del plan de cambiar a Rafael Devers lo representa su contrato. Al dominicano le dieron en 2023 la mayor extensión en la historia de la franquicia, un pacto de 313.5 millones de dólares por 10 temporadas que apenas está en su segundo año. Aunque hay un diferimiento de pagos para $75 millones, son más de $250 millones los que se le adeudan, un monto significativo que hará muy difícil que en Boston consigan un socio, ni siquiera ofreciendo efectivo para ayudar a costear el gasto.
2. Su rendimiento como tercera base resta interés en el mercado
Devers llegó a mostrar mejorías en los últimos años, pero su defensa de la antesala está lejos de ser élite y eso afecta su valor de cambio. Ha sido el líder en errores entre los tercera base de la Liga Americana consecutivamente desde 2018 y en tres de esas temporadas sumó más de 20 pifias. En 2024 terminó con -9 de DRS (carreras defensivas salvadas) y de por vida tiene -62, lo que significa que permite más anotaciones de las que ha evitado. Es un gran bateador, pero con el guante tiene una debilidad.
3. Pocos equipos podrán ofrecer un pacto justo por él
Las consideraciones financieras de su contrato no son el único problema. Rafael Devers es un ganador de dos Bates de Plata, un jugador con tres invitaciones al Juego de Estrellas y dueño de un anillo de campeón de Serie Mundial. Es un jugador que promedia más de 30 jonrones, 40 dobles y 100 remolcadas por año. Todo eso significa que adquirirlo en un cambio implicará un elevado retorno, sobre todo en prospectos de primera categoría, y pocos equipos podrán cumplir esa exigencia.
4. Es el líder del equipo y podría afectar al resto del grupo
Unas declaraciones de Triston Casas en la primavera en defensa del líder del equipo dejaron ver que la situación de Devers puede generar problemas con el resto del grupo. Se desconoce cómo ha reaccionado el vestuario a la más reciente polémica, más allá de que Trevor Story aseguró que se hablaría a su tiempo y en lo interno. Pero no se puede dejar lado que el dominicano es la máxima figura del equipo y que un movimiento de salida tendrá consecuencias en el ánimo del grupo y muy probablemente de los aficionados.