El contrato de Sandy Alcántara que absorberían los Yankees en el cambio con los Marlins

La apertura de Sandy Alcántara en la jornada dominical de MLB representó su quinta derrota en fila, pero el as de los Marlins de Miami no está demasiado preocupado por sus números.

El derecho dominicano, de 29 años de edad, dejó su balance en 2-5, pero vio bajar su efectividad a 8.10 y llegó a 31 abanicados en 36.2 innings. En su salida ante los Medias Blancas consiguió sus mejores marcas de esta campaña de Grandes Ligas en velocidad (99.9 mph), lanzamientos (107) y ponches (ocho).

Y eso es alentador para alguien que viene de perderse más de un año por una cirugía Tommy John y que siente que avanza hacia su mejor nivel. “Me gustaron las primeras cinco entradas”, dijo Alcántara al portal de MLB.com. “Sólo un lanzamiento cambió el juego. Intenté ejecutar mi mejor slider por ahí, lo dejé justo ahí en el medio, y simplemente lo conectó”.

Parecen estar de acuerdo los ejecutivos del circuito, que ven al dominicano como la gran pieza del mercado de cambios antes de la fecha límite del 31 de julio. “En la fecha límite, podría exigir un buen precio con hasta dos años y medio de control restantes en su contrato”, pronosticó un gerente de la Liga Americana en declaraciones a Mark Feinsand.

Uno de los equipos que se asoman como contendientes por su adquisición son los  Yankees de Nueva York, que necesitan reforzar su rotación de abridores y que acaban de conocer que hay un retroceso en la recuperación del veterano Marcus Stroman.

Se sabe que en el Bronx quieren alejarse de fuertes compromisos por cautela ante el impuesto al lujo, pero el contrato que heredarían si obtienen a Alcántara no les representa mayo peso.

El derecho tiene estipulado un salario de 17.3 millones de dólares para esta campaña. Es la misma cantidad que ganará en 2026, el último año garantizado de la extensión de contrato que firmó en 2022. Al pacto le queda una opción del club por $21 millones para 2027.

Alcántara es un ganador del Cy Young que está reconocido como un abridor de élite. A pesar de los números que tiene en este momento, lo importante es que su brazo está sano y que si consigue algunos ajustes puede retomar su dominio en cualquier momento de la campaña y todavía le quedaría un tiempo bajo control.

Por eso para los Yankees valdría la pena adquirirlo, si bien la negociación implicaría el sacrificio de varios de sus prospectos top, incluyendo al outfielder Spencer Jones.